Dudas sobre la eficacia del plan del presidente
“El Tribunal Supremo ha rechazado repetidamente de forma continuada el uso de la pena de muerte en casos donde el individuo condenado no ha incurrido en un homicidio”, advirtió ayer la Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU, en sus siglas inglesas) en reacción al anuncio del presidente, Donald Trump, de que su Departamento de Justicia va a pedir aplicarla al máximo para castigar a los traficantes. Desde el punto de vista médico, también hay dudas sobre la efectividad de la medida. “Confiar en la justicia penal para responder a problemas de salud pública ha demostrado ser insensato, costoso e ineficaz”, según el profesor Guohua Li, experto en epidemiología de la Universidad de Columbia. Para Maria McFarland Sánchez-Moreno, directora de Drug Policy Alliance, Trump está usando esta crisis “para sus propios intereses políticos”; la iniciativa, declaró ayer en la cadena CNN, es “profundamente cínica”.