Ser feliz es una elección

Si verdaderamente lo quisieras, serías feliz, ahora por ejemplo. Pero igual crees que debes sufrir un poco más antes de ser feliz o “cuando me pase esto o...”. Siempre hay una excusa para no ser feliz. Crees que la felicidad es cosa de otros, de los ricos, de los famosos. O de la gente que conoces, que tienen algo más que tú o algo que tú no tienes. Pero si supieras que la felicidad se elige, serías feliz ahora, nada de preocuparse, nada de peros... Ser feliz ahora, no mañana o el año que viene.

¿Puedes ser feliz ahora, por sólo unos segundos, sin tener mala conciencia? A mí me ha pasado. Cuando yo era feliz, de pequeña, casi tenía mal de conciencia. “No puede ser, ¿me pasará algo malo o habré hecho algo malo?”, me decía. Debe de ser toda la educación que he tenido de las monjas que educaban a uno a sufrir y cualquier alegría era obra del diablo. Ahora no, ahora es al revés. Todo está permitido, y la gente confunde libertad con libertinaje, hacer lo que a uno le da la gana. Eso entendemos por ser felices. Pero ¿qué pasa cuando no tienes lo que quieres, cuando no haces lo que te da la gana? Por eso esta sociedad hoy en día cambia todo el tiempo, pasa de estar todo bien a estar todo mal.

Ser feliz es una elección, sólo una elección, no depende de nada. ¿Y sabes lo que necesitas para encontrar la felicidad? Dejar de buscarla. Sólo así la encontrarás.

En realidad ya la tienes, está aquí justo donde estas tú. En lo más profundo de tu ser. Allí está, esperándote. ¿La quieres?

ROSA SALA BURGAYA

Odense (Dinamarca)