La Vanguardia (Català-1ª edició)
La segona lluna plena del mes d’agost
Cata Jiménez capta la imatge de la impressionant lluna blava, o segona lluna plena, que hem pogut gaudir aquest mes d’agost. La foto està feta a la localitat de Sencelles, a Mallorca. Podeu compartir les vostres fotografies al correu participacion@lavanguardia.es
como un “peligro al volante”. Desengañémonos, el peligro al volante no es la gente mayor, sino los jóvenes imprudentes que se lanzan a conducir sin experiencia ni prudencia. Las estadísticas demuestran que el número de accidentes disminuye con la edad. Yo tengo 79 años y conduzco, casi diariamente, desde los 18.
Hoy me siento con plenas facultades físicas y mentales, conduzco con prudencia, respeto todas las normas y a los demás conductores, y me siento seguro al volante. No he tenido ni un solo accidente, ni una sola multa de tráfico después de los 60 años. La experiencia es el mejor aliado de la conducción, mejora tus reacciones ante cualquier evento inesperado y te vuelve prudente y sensato.
No se debe discriminar a nadie ni establecer ningún límite por la edad si se tiene un buen estado de salud. Para ello están las pruebas de renovación del carnet, más frecuentes con la edad.
Oriol Valls Planells
¿Jóvenes preparados?
Frecuentemente leo que los jóvenes actuales son la generación mejor preparada en décadas. Pero al mismo tiempo vemos millares de ellos organizando botellones y fiestas ilegales sin distancia ni mascarillas,
Las fiestas de Gràcia
Porto més de trenta anys a Catalunya. Agosto del noventa y ocho. Mi empresa italiana me mandó en modalidad reconocimiento. Aparco la macchina dell’impresa (el coche de empresa) en el garaje del hotel. Ceno y pregunto al camarero qué es lo mejor que se puede hacer esa noche. “Hi ha la festa de Gràcia, senyor”. Todavía trajeado, un italianissmo spigato azzurro (un superitaliano vestido con traje de espiga azul) ,llegoa los Jardinets de Gràcia. Una pareja de policía a caballo me saluda. Camino. Sigo las notas de unos instrumentos. En una plaza, unos chicos y unas chicas en traje de época bailan en círculo tomándose de la mano. En una callejuela, desde un banco decorado, una señora me llama: “Guapo, vingui, vingui”. Me pierdo. Todas las calles están adornadas. Familias sentadas en la puerta de su casa, charlando.
Fórmula para el cambio
¿Es posible que uno quiera a una persona y luego deje de quererla? Los que realizamos un trabajo de crecimiento personal sabemos que pequeños cambios consistentes pueden influir en un cambio mayor. Es decir que si durante unos meses estoy locamente enamorado de una persona, puede que después ya no. ¿Qué ha pasado? Con el tiempo nuestras ideas cambian. Con las ideas cambian nuestros sentimientos. Con los sentimientos cambian nuestras acciones. Eso hace que cada vez tengamos hábitos más y más lejanos de los anteriores. El resultado es que ya no tenemos los mismos gustos.
Para los que creen que es imposible cambiar, será imposible cambiar. Porque para cambiar hay que tener fe. Fe y un deseo ardiente, como diría Napoleon Hill (escritor estadounidense de autoayuda y superación).
Vahagn Chobanyan