Falta entendimiento mutuo

ner las medidas adecuadas, en un plan mundial de vacunación, a fin de que todos los países den inicio a la finalización de la pandemia, y comienzo a la recuperación tanto en los suministros de componentes como de la economía mundial.

Se ha dicho un millón de veces que el virus no entiende de fronteras, países, etnias, religiones, ideologías. Todos los habitantes del planeta tenemos un mismo denominador común, siendo seres humanos susceptibles de contagiar y ser contagiados. La clase política entiende la situación como una carrera armamentística, al reforzar unos países con más dosis y dejar a muchos otros sin ningún antídoto. Y así todo hace pensar que las Navidades del 2021 van a ser iguales que las del 2020, a pesar de ser uno de los países con mayor tasa de vacunación y de refuerzo. Algo no estamos haciendo bien.

En situaciones como la actual, es cuando se necesitan verdaderos líderes que demuestren ser capaces de solucionar los obstáculos que las circunstancias traen a nuestras vidas. Lo demás es predicar en el desierto.

Pedro Marín Usón

Zaragoza

Estos días es imposible no pensar en el niño de Canet de Mar y en su familia, que se han visto atacados por el simple hecho de pedir que en su colegio se imparta una asignatura en castellano. Amenazas en redes, llamadas para hacer el vacío al niño en clase o la publicación de la identidad del padre han sido algunas de las acciones que forman parte de la campaña de acoso a la que ha sido sometida la familia.

Esta situación me hace observar que se ha perdido la preservación de la diversidad lingüística, lo que, a mi entender, es altamente peligroso. Más teniendo en cuenta que las lenguas definen nuestras identidades personales y pueden tender puentes entre las personas y las culturas al facilitar el entendimiento mutuo, cosa que, claramente, no se está llevando a cabo en este caso.

Alex Garcia Busquets