“Coaching en la cocina permite reflexionar sobre la manera que tenemos de relacionarnos en el trabajo”
Coaching en la cocina es una apuesta pionera y muy innovadora de Pep Soler (Espai Boisà) y Arantza Uriarte (C+C+S Consultoria) consistente en potenciar los equipos de trabajo de las empresas a través de la cocina, aprovechando el hecho de que en este espa
¿Cómo surgió la idea de crear Coaching en la cocina?
La idea surge alrededor de los fogones del Espai Boisà, el primer espacio gastronómico de Barcelona, donde empiezas haciendo un taller de cocina y terminas comiendo como en un restaurante y en donde la alimentación es de origen ecológico y procedencia local. Un concepto dirigido tanto a grupos de amigos como a empresas que se basa en la idea de cocinar en grupo, pasarlo bien y luego comer lo que se ha elaborado. A nivel particular realizamos fiestas en la cocina para grupos que busquen privacidad y exclusividad (aniversarios, encuentro entre amigos, reuniones familiares, etc.), mientras que en empresas la actividad consiste en reunir equipos de trabajo en un entorno cálido para potenciar su cohesión a través del ancestral hecho de cocinar juntos. A raíz del encuentro con Arantza y la buena sintonía laboral que surgió, así como la pasión en temas de sostenibilidad que compartimos, decidimos ir un paso más allá e introducimos también labores formativas, de coaching y reflexión para mejorar el funcionamiento de grupos de alto rendimiento.
¿Qué tiene de especial la cocina para que sea utilizada en actividades de coaching empresarial?
A la hora de cocinar en grupo surgen de manera espontánea nuestros comportamientos más innatos, aquéllos que también surgen en nuestras relaciones laborales diarias. Dejamos que fluyan para luego trabajar sobre ellos, enfocarlos y pulirlos desde el prisma del coaching. De esta forma, los participantes en nuestras actividades aprenden a potenciar la confianza en sus entornos de trabajo, la comunicación y una forma de relacionarse más productiva y humana.
¿Tanto se parecen la cocinay elámbito laboral?
Sí, existe un gran paralelismo entre la cocina creativa y el mundo de los equipos empresariales. Cocinar en grupo puede convertirse en una actividad bajo presión si, por ejemplo, preparamos un menú con pocos recursos o cocinamos con impedimentos o dificultades, porque afloran muchos aspectos de interés, como la confianza en los demás, la capacidad de innovar al cocinar o de presentar un plato, construir un equipo en el que cada uno tenga una misión, superar algunos miedos y barreras (el miedo a quemarse, a cortarse, a mancharse) que tienen su correlato en el mundo empresarial. Todo esto tiene mucho que ver con el día a día de muchas empresas en estos tiempos en que la creatividad y el trabajo en equipo son valores que pueden marcar la diferencia.
¿Cómo funciona exactamente una actividad de Coaching en la cocina?
Hacer coaching a los equipos significa acompañarles y evidenciar cómo los grupos se han organizado para preparar sus menús, qué estrategias han tenido en cuenta y qué podrían haber hecho de forma diferente, más eficaz. Se trata de promover un aprendizaje muy divertido y productivo que sea recordado por los participantes durante mucho tiempo por lo distinto que resulta y, sobre todo, por ser una experiencia compartida. Es lo que en coaching definimos como un “anclaje”. Para ello contamos con un equipo multidisciplinar integrado por chefs, gestores y coaches certificados.
¿Qué respuesta estáis obteniendo hasta ahora por parte de los clientes?
Hasta ahora, la experiencia de las empresas que han participado en estas actividades -tanto en Barcelona como en Madrid- ha sido muy satisfactoria. En primer lugar porque se divierten y relajan, ya que a todos nos gusta comer y charlar, y en segundo lugar porque se sorprenden al comprobar que a través de nuestras actividades de Coaching en la cocina podemos reflexionar sobre la manera que tenemos de relacionarnos entre nosotros: de qué forma establecemos los roles en el equipo, cómo superamos el miedo a lo desconocido, cómo reaccionamos en equipo bajo presión, cómo nos organizamos para impactar positivamente a un chef que después valorará nuestros platos... Las personas se acaban conociendo mucho más en un breve espacio de tiempo que tras varios meses de trabajo en sus oficinas.