Televisión de calidad

A Pablo Iglesias puede que le haya faltado acierto al meter el dedo en la llaga sobre la emisión de programas religiosos en la televisión pública, en concreto la misa de los domingos. Las opiniones son respetables pero los datos son fehacientes: más de la mitad de los españoles son católicos y muchos enfermos y gente mayor sigue la misa por televisión. Luego, se trata de un servicio abierto al ciudadano, tan respetable como un documental de Otros pueblos o un magacín de cocina con los hermanos Torres.

Respecto a los programas con temas de gastronomía, tengo la impresión de estar en una burbuja in crescendo sobre estos temas en horas punta (de 19 h a 21 h), por ejemplo, España directo. Entiendo que tenemos una excelente cultura culinaria, pero un excesivo énfasis en detrimento, lógico, de otros temas culturales y del saber: pensamiento, ciencia, arte, música…, puede acabar empobreciendo la sociedad. Animaría, desde aquí, a los responsables a crear programas de mayor calado, variedad y riqueza global.

ALFONS SÁNCHEZ

Sant Cugat del Vallès