Justicia ejemplarizante
A uno se le pone cara de tonto por no haber sido más inteligente y haber puesto sus valores en una escala donde lo primero hubiese sido medrar y después, a una gran distancia del beneficio propio, la ética, la honradez y el resto de principios universales.
Me planteo si no hubiera sido mejor acercarme al poder para vivir a cuerpo de rey, amontonar un gran capital patrimonial y, si me enganchan al llegar a la vejez, que me pongan una sanción y ¡que me quiten lo bailao!
No sé si, al final, este será el resultado de algunos juicios que se están celebrando y cuyos planteamientos son los que describo; en todo caso, me anticipo a la sentencia para recordarnos a todos que, la justicia debe de cumplir, entre otras, una función ejemplarizante para disuadir a futuros desalmados de actuaciones similares.
No es el primer caso que acaba con la devolución de lo defraudado dando a entender que se devuelve lo hurtado porque les han pillado, que si no…
JUAN MARIN MARTOS
Molins de Rei