Rebelión del paciente

Gracias al doctor Alguacil y a la valiente idea de escribir un manifiesto dirigido al Departament de Salut, gran parte de los sanitarios (médicos, enfermeras, personal administrativo) nos hemos dado cuenta de que no todo está perdido. En el manifiesto se reclama el reintegro de los presupuestos que fueron recortados a la atención primaria de la sanidad por y con la excusa de la crisis económica. ¿Por qué no nos hemos rebelado antes? Posiblemente por la naturaleza poco solidaria y escasamente sindicalista del colectivo médico, porque nos hemos convertido en resilientes para sobrevivir en el sistema, porque a expensas de mucho esfuerzo humano de los profesionales hemos ido medio trampeando la precariedad y, por último, porque se ha elegido a gestores con escaso poder ejecutivo, pero gran capacidad de contener las quejas de sanitarios y pacientes.

Durante todo este tiempo, me he preguntado por qué razón no se ha dado la rebelión del paciente. Cuando la demora para una cita con su médico supera las tres semanas o el mes, la cita con un especialista se demora más de un año, una exploración complementaria se posterga por falta de medios, o se le cambia una medicación por razones puramente económicas... la respuesta del paciente siempre es bastante com- prensiva: “Son los recortes de la crisis”. Pocos son los que reclaman por escrito, quizás porque sus reclamaciones frecuentemente sirven de poco ya que las responde el mismo gestor cuya función es la de hacer máxima contención. Así es que hasta aquí hemos llegado.

MERCÈ BERNAD

Barcelona