El porvenir de Rajoy
Sólo es mi opinión. No tiene otro valor más que ese, pero creo que el 1 de octubre será el día del fin de Rajoy como político. Si se celebra el referéndum, no tendrá más remedio que dimitir, después de comprometerse, insistentemente, en no permitirlo. Y si no se celebra, será porque Rajoy habrá empleado todos los medios posibles para impedirlo. Ello provocará protestas, manifestaciones y disturbios que le harán perder todo su prestigio político, tanto en España como en el extranjero.
No podemos olvidar que Rajoy es un registrador de la propiedad. Y yo, con todo el respeto para ese colectivo, jamás pondría como gerente de mi empresa a un registrador de la propiedad. Rajoy, como buen funcionario, sabe poner en orden las cosas y aplicar el reglamento. Pero no sabe resolver problemas. Rajoy ocupa un cargo para el que no sirve.
GERARDO SEGURA DE LUNA
Barcelona