La oportunidad está aquí
En Foro Empresarial queremos plantear cuáles son las oportunidades y las amenazas que afronta hoy la empresa española. Para ello, analizamos el contexto económico en el cual estamos inmersos, cuáles son los sectores con mayor potencial de crecimiento y cuáles serían los riesgos más habituales, qué nos depara el ámbito digital y cómo desde el sector financiero y el legal las empresas pueden tener un acompañamiento para hacer frente a los retos futuros y presentes.
Para ahondar en las oportunidades de la empresa española, podríamos definir un extenso listado de pilares en los que se sustentarían los retos de las compañías para crecer en el contexto económico actual. Pero preferimos poner el foco en los que están marcando las pautas disruptivas de las empresas que avanzan en buena dirección. Las oportunidades que ya tenemos aquí y que no debemos dejar escapar.
La primera de ellas sería la innovación. Cualquier negocio debe tenerla presente en su actividad. No únicamente en su producto final o servicio, sino en todas las fases de producción y en la propia estructura de la empresa. El negocio que innova, es el que se renueva día a día y, por lo tanto, el que estará siempre adaptado a cada contexto y momento concreto, pudiendo así hacer frente a cualquier amenaza y superar cualquier reto.
Ligada a esta innovación, la empresa debe aprovechar toda oportunidad de mejorar la eficiencia. Simplificar procesos, analizar permanentemente el entorno, cuestionarse cada paso, aprender de errores y adquirir de ellos know
how, le permitirá lograr el reto final de la mejora de la competitividad.
Afrontar la globalización sería otro punto fundamental. No es el futuro, es el presente. La empresa puede sumarse al mercado global con estrategias de expansión y aprovechar así el enorme potencial de crecimiento que se abre. Debe ser consciente de que es una realidad y debe adaptarse a ella.
Una vía posible para la expansión internacional es la digitalización. Pero esta transformación digital no es únicamente disponer de la tecnología, sino saber explotarla para dar soluciones al cliente de forma fácil y ágil.
Por último, para estar entre las empresas líderes es necesario dotarla de unos valores corporativos diferenciales. Ser diferentes respecto a negocios de la competencia aportando un valor añadido, un compromiso con el entorno y con el consumidor, más allá de la relación comercial.
Y, les añadimos dos bonus track, que sustentan de manera sólida todos estos pilares: saber captar y gestionar talento para la organización y poner al cliente siempre en el centro. Rodearse de nuevos talentos y oír al consumidor es básico para que la empresa sobreviva. Actualmente, el cliente nos demanda digitalización y un valor añadido, y a su vez, el talento lidera la innovación a desarrollar y nos hace más competitivos y eficientes.