Bélgica, mi país

Soy belga y paso la mitad del año en Catalunya desde el 2011. Me sorprende enormemente que los independentistas siempre resaltan el nivel democrático de Bélgica. Por ello, me gustaría resaltar una serie de hechos.

El primero es que la justicia en Bélgica es lenta y tarda años en resol ver los proces os. Sor pren dentem en te, cua n dot ien e que resol ver cas osque en Es pa ñ au n juez ha trabajado un año o más, pueden decidir en unos días.

Otro aspecto es que en Bélgica está prohibido hacer referéndums, excepto a nivel municipal, que no son vinculantes. También me sorprende que los independentistas en ningún momento han reconocido que en Alemania están prohibidos los partidos independentistas.

Poner lacitos, banderas y cruces en espacio público está claramente prohibido en Bélgica. El Ayuntamiento tiene que dar permiso para el uso del espacio público y nunca se permite publicidad partidista política exclusiva. Tampoco se puede poner un belén en el Ayuntamiento porque es católico y el Ayuntamiento jurídicamente tiene que ser neutral.

Por último, se me hace difícil imaginar que el ministro-presidente de Flandes (del partido nacionalista y muy amigo de Puigdemont) decida atacar el Estado belga. El Gobierno central y las otras comunidades jamás lo permitirían y exigirían su inmediata dimisión.

MARK LAMOTTE

Santa Cristina d’Aro