El personal de Rodalies
El pasado jueves iba en un tren de cercanías procedente de Sant Vicenç de Calders destino Manresa y nada más apearme en Arc de Triomf me doy cuenta de que me he dejado la chaqueta con toda la documentación, además de dinero.
Subo corriendo y comunico a la persona de la taquilla y al personal de seguridad lo ocurrido, y que es muy fácil localizarla. También les indico que falta una hora y veinte para que el tren llegue a su destino y que hay innumerables paradas. Su respuesta es que no pueden hacer nada, a pesar de todo el personal de Renfe Rodalies y de seguridad que debe de haber entre las dos estaciones.
Impotente, me quedo esperando la fatídica noticia: una vez llega a destino, ya no hay chaqueta ni cartera.
Durante unos años estuve utilizando el servicio de Ferrocarrils de la Generalitat. En este tiempo me encontré en un par de situaciones similares y en unos minutos habían encontrado el objeto y me lo hicieron llegar de forma fácil y rápida a través de su personal, totalmente implicado en atender y solucionar la situación.
Hay infraestructuras que pueden ser costosas en muchos sentidos, pero el servicio y la atención a veces sólo requieren un poco de voluntad y organización.
DAVID NAVARRO
Martorell