“Emprende con los valores del rock: libertad, lealtad y respeto”
Josep Coll es un personaje curioso, atípico. Será porque es emprendedor. Contacté con él por correo electrónico y, como vive en Nueva York, le pedí una fotografía. Cuando la recibí (la que ven en esta página) pensé: "Vaya fantasma". La entrevista se hizo por Skype un viernes a las ocho de la tarde, y después de diez minutos de monólogo –habla por los codos– ya había cambiado de opinión: "Qué tipo más interesante", me dije. Valoren ustedes y, si les interesa, vayan a verlo el día 12 de junio a las 18 horas en Bizbarcelona donde, acompañado por su guitarra eléctrica, explicará cómo crear una
start-up con solo 3.000 euros. Después de la conferencia invitará a una cerveza a todos los asistentes y presentará Ruta al Paraíso: de Barcelona a Bora a Bora en moto para recaudar fondos contra el cáncer. Coll aúna emprendimiento, solidaridad y rock and roll.
¿En Bizbarcelona dará a conocer lo que nunca se ha contado de Red Points? Explicaré cómo nos salvamos de los tsunamis, cómo levantamos el proyecto después de subir una montaña, cruzar el desierto… La historia de la compañía es una historia de lucha, de superación… Nos ha pasado de todo.
Lo importante es disfrutar del camino, dejar trabajar a la gente, fomentar el equipo, reír juntos…
¿Por ejemplo? Un socio montó una empresa paralela copiándonos la idea y haciéndonos la competencia; tuvimos problemas muy graves con un CTO; he recomprado mi empresa un par de veces… No obstante, Red Points está entre las 25 mejores start-up de Europa en Legal Tech. Hemos logrado superar todos los problemas y convertirnos en un trasatlántico, con 200 personas trabajando en Barcelona y 20 en Nueva York, porque soy muy optimista, y siempre pienso que todo saldrá bien. Además, cuando tienes una buena idea, aguantar funciona. ¿Cuándo sabes que tienes una buena idea? Cuando alguien te dice que es imposible. Eso significa que has acertado, que aquí hay negocio. En el proyecto en el que ahora estoy metido, todo el mundo me dice que es muy difícil, imposible… Lo que me reafirma que vamos por buen camino. ¿De qué se trata? Si Red Points lucha contra la piratería y elimina falsificaciones de internet, ahora lo que quiero es montar una excavadora digital para controlar a Google. ¿Es posible controlar a Google? Es posible y es un negocio. Con nuestra excavadora eliminaremos fake news y añadiremos
news buenas, lo que nos permitirá controlar a la bestia: David contra Goliat. Nosotros seremos los que controlaremos a los buscadores, y no al revés, como sucede ahora. ¿Cómo tiene previsto impulsar este nuevo proyecto? He hecho una llamada a la selva para buscar emprendedores, y la convocatoria ha sido un éxito. Lo que quiero es rodearme de gente con ideas e iniciativa, ser su inversor y darles la oportunidad de crear su empresa estando yo a su lado. Quiero ayudarles con mis conocimientos a arrancar el negocio, pero éste no será mío, sino de todos, aunque yo pongo el dinero inicial. Y lo haremos como siempre: con humor, buen rollo, y empezando de cero, que es como debe empezar una empresa, de la nada. ¿En Barcelona o en Nueva York? Después de una family experience de un año de estancia en Nueva York, vuelvo a Barcelona para impulsar este proyecto porque estoy convencido de que Barcelona está llamada a ser el hub mundial de la Legal Tech. ¿Llega un momento en el que es imprescindible que el emprendedor abandone el proyecto para dejar paso a otros profesionales y se dedique a nuevos proyectos? Cuando entran en juego los fondos de inversión –en mi caso hemos hecho siete rondas de inversión–, la empresa ya no es tuya. Y en esta etapa más corporate ,vi que realmente no era necesario. Yo soy un arquitecto de ideas, y aquí la casa ya estaba completamente acabada. Además, el manual de emprendimiento indica que llega un momento en el que el fundador debe salir. Lo aceptas, te vas y buscas otra cosa.
¿Y cómo logra atraer a los mejores? Aplicando la cultura mediterránea y los valores del rock: libertad, lealtad y respeto. Siempre he confiado en las personas a las que he fichado y las he dejado trabajar.
¿Cómo aplica la cultura mediterránea al emprendimiento? A mi me gusta reír, ir a comer con el equipo, pasarlo bien… Y la cultura mediterránea es esto: disfrutar del camino, dejar trabajar a la gente, fomentar el equipo, reír juntos… Nosotros montamos grandes edificios sin dinero y hay que hacerlo dando calor, ayudando, motivando…
Además de emprendedor es mentor. Soy mentor solidario. Este año he asesorado a treinta start-ups a las que no cobro nada, porque considero que entre alpinistas nos tenemos que ayudar, pero les paso el número de cuenta corriente de la oenegé Sense Sostre y que den lo que consideren.
¿Existe un gen del emprendimiento? Si existe, yo lo llevo en la sangre. Soy de Sant Feliu de Guíxols y mi bisabuelo fue a Fernando Poo, en África, a trabajar en las plantaciones, y toda mi familia ha sido emprendedora.
Un consejo a los emprendedores. Pensar siempre “sí se puede” y en grande, y si la idea es buena, a por ella. Y no abandonar o cerrarse al primer contratiempo.