El correcto mantenimiento de los ascensores: punto clave de la seguridad
Los ascensores son un medio de transporte muy utilizado en las ciudades, pudiéndose considerar como el más cotidiano; con el que accedemos cómodamente a nuestras viviendas, centros comerciales, hoteles, estaciones de metro, hospitales, etc. Por eso esperamos que funcionen correctamente y nos garanticen confort y seguridad.
Millones de viajes en ascensor se producen cada día en todas las ciudades. La tranquilidad de esos viajes parte de un correcto mantenimiento que garantiza su funcionamiento y su seguridad, siendo aplicado por las empresas ascensoristas de acuerdo a lo establecido por la normativa vigente y por el reglamento que regula su actividad.
¿Subiría en un ascensor que no le pareciera seguro?
El parque de ascensores existente en Catalunya alcanza las 200.000 unidades, del algo más de un millón de instalados en España, de los cuales 145.000 están concentradas solo en la provincia de Barcelona. Con el elevado número de aparatos instalados y moviendo diariamente millones de usuarios, podemos afirmar que los ascensores son seguros, siendo muy bajo el índice de incidentes. El mantenimiento preventivo debe ajustarse a las necesidades de cada instalación, en la gran mayoría de casos se realizará mensualmente, comprobando el correcto estado del equipo, realizando pequeñas reparaciones y vigilando la limpieza y el orden.
Correcto mantenimiento…y uso responsable
Los titulares también tienen obligaciones, como suscribir un contrato de mantenimiento con una empresa conservadora, de mantener el aparato en buen estado de funcionamiento durante el tiempo que es utilizado, solicitar, en la fecha que corresponda, a un organismo de control autorizado la inspección periódica reglamentaria, y corregir y subsanar los posibles defectos que se detecten.
La inspección periódica es obligatoria
La inspección de los ascensores, igual que sucede en otros ámbitos de la seguridad como la revisión del gas, son obligatorias. Los propietarios tienen la obligatoriedad de efectuar la inspección periódica reglamentaria de sus ascensores en el plazo de tiempo que la normativa señala, siendo 2 - 4 ó 6 años según corresponda, y para ello deben solicitarlo a un organismo de control autorizado. La empresa de mantenimiento deberá recordárselo como mínimo dos meses antes de la fecha de la próxima inspección. El resultado de la inspección podrá certificarse como “favorable” o con “defectos graves” o con “defectos muy graves”. En caso de un acta con defectos muy graves, la instalación deberá quedar fuera de servicio y no podrá volver a ponerse en funcionamiento hasta que los defectos hayan sido corregidos y así lo certifique el mismo organismo de control con una segunda inspección. En caso de un acta con defectos graves, se abre un plazo de seis meses para su arreglo, que realizada dentro de plazo se comunicará al mismo organismo de control que ha realizado la inspección para que lo certifique con una segunda. En caso de superar el plazo indicado pasaría a ser considerada como un acta con defectos muy graves y se actuaría dejando el ascensor fuera de servicio hasta su correcta adecuación.
Etiquetas identificativas
Como resultado de la inspección, el organismo de control instalará la etiqueta identificativa, que podrá ser de color verde, amarillo o roja. Fácilmente identificaremos estos colores, a modo de semáforo, con la situación de nuestro ascensor. Las inspecciones garantizan el buen funcionamiento del aparato y la seguridad del usuario y confirman el trabajo efectuado por la empresa ascensorista en las revisiones ordinarias de mantenimiento que realiza a lo largo del año.