CARÁCTER SOCIAL
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”Estar en la Clota tiene un triple beneficio: el cotrabajador que empieza y no quiere invertir dinero en un espacio paga con un retorno social que además le supone visibilidad en el barrio”. Los vecinos ven como unos locales que llevaban tiempo en desuso vuelven a tener vida, luz y actividad, lo que favorece la dinamización económica de proximidad.Y el tercer beneficio es para el tejido social del distrito, “porque el retorno social se hace de acuerdo con las entidades del territorio. Estamos preparando un catálogo para visibilizar los proyectos que tenemos aquí”, explica Mar Vallecillos.
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Umami lo forman David Coronado y Lakshmi Fabiani.“La idea es hacer un ‘take away’ con degustación, enfocado a los tápers diarios. Trabajamos con tápers ecológicos y productos de proximidad”, explica Coronado. “Queremos ofrecer un menú saludable porque nos hemos dado cuenta de que hay muchos restaurantes, pero la oferta es similar: pizza, pasta, bocadillos o la típica ensalada. Nosotros les proponemos un menú equilibrado, vistoso y rico”, añade.“Nuestra idea es tener un local donde atender a nuestros clientes, para que vengan a encargar sus tápers”, explica Fabiani.
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Anna Blanco es diseñadora de moda.Tras muchos años en multinacionales decidió crear Bla&Co, un estudio de diseño de estampados de moda bajo criterios de sostenibilidad. Lleva en La Clota desde que abrió el centro, en mayo, y valora “muy positivamente” la experiencia. Además, aquí ha encontrado otros proyectos con los que colaborar, como PeloPuré, de diseño y comercialización de cojines de lactancia. Ya ha realizado el pago del alquiler en dos ocasiones: como dj en las fiestas del barrio a petición de la Associació de Diables d’Horta, y ha diseñando los carteles de las fiestas.
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Jordi Díaz y Enrique Conches son los creadores de Nanoescopista, un proyecto de “divulgación de la ciencia y la nanociencia, especializado en técnicas de creatividad y enfocado al retorno social sobre todo para niños y con aspectos educativos”, explica Díaz. Otra línea en la que trabajan está dirigida a la Responsabilidad social corporativa. Están en La Clota desde octubre, ya se han reunido con entidades del barrio “y empiezan a salir propuestas”, explica Díaz.“Estamos contentos de estar aquí y se ha generado mucha colaboración con otros emprendedores”, según Conches.