Mi nueva realidad
Los días pasan sin prácticamente darte cuenta. Te levantas, desayunas, trabajas y/o estudias y te vuelves a la cama. Esta rutina está empezando a volverme loca. Es imposible desconectar cuando te pasas el día conectada ante una pantalla, sales poco, casi no ves a nadie y la improvisación no tiene espacio.
El teletrabajo me ha traído cosas buenas, pero, combinado con los confinamientos, también me ha dejado en un estado de estrés y conexión laboral constante del que difícilmente puedo escapar.
Montse Grau Roca Vilanova i la Geltrú