Delito de malversación
el Gobierno español está planteando graduar el delito de malversación. La malversación se produce cuando se destinan los caudales públicos para un uso ajeno a su función. si el gobernante dispone a su antojo lo ingresado en el tesoro público, sea en beneficio personal o no, es malversación a secas, ni grave ni leve. si después se lo lleva a su bolsillo, habrá un delito adicional. el jugar con una malversación buena o mala es muy peligroso, ya que se está blanqueando la discrecionalidad de lo público. el gobernante, para destinar dinero a otra partida diferente a la prevista, debe hacer pública su propuesta, presentarla en el Parlamento y cumplir los requisitos legales correspondientes. Jorge Vidal-Quadras Barcelona