Contra Franco y el Klan
Narrativa Nueva colección sobre la cultura negra en España
Valencia, 1937. Dos negros americanos coinciden en un camión hacia el frente de Teruel. James Yates es voluntario de lasbrigadas Internacionales. De los cuarenta mil brigadistas, tres mil eran estadounidenses, casi un centenar, negros. El azar ha querido que conociera al autor del único libro que ha podido pasar al cruzar clandestinamente el Pirineo: el poeta Langston Hughes. Intercambian historias y hacen repaso de todos los combatientes de color que conocen. Llegan al frente de madrugada, hace mucho frío, James le da una manta a Langston, se despiden, quizá nunca más se volvieron a ver. Los dos escribieron sobre la guerra civil. James Yates: De Misisipi a Madrid. Memorias de un afroamericano en la Brigada Lincoln. Langston Hughes: Escritos sobre España, recopilación de sus crónicas para el Afro-american, fragmentos de memorias y poemas de guerra. Con estas obras inauguran juntos la colección de La Oficina, BAAM ( Biblioteca Afroamericana Madrid), que dirige Mireia Sentís, especialista de referencia de la cultura negra americana en España.
Son dos obras de gran interés para los expertos en Guerra Civil y en la cultura negra americana y sus luchas de liberación. Excelente inicio para esta colección: dos miradas complementarias. Una, la del soldado Yates, es la del luchador comprometido que, desde su Misisipi natal, emprende un arduo viaje hacia el norte, Chicago, Nue- va York, para liberarse del racismo. Sufre el crack del 29, malvive en la calle, participa en manifestaciones y protestas. Se implica hasta la médula. Ser voluntario contra el fascismo en España es, para él y sus camaradas, la continuación normal de la lucha. Su relato es un recorrido documental a través del blues, el jazz, las fiestas, Harlem, los mítines y el despertar de la conciencia negra progresista. Sus meses en las trincheras aportan otra mirada sobre España, una visión, en primera persona, del dolor, pero también de la valentía y el orgullo de sentirse un hombre nuevo.
En la Guerra Civil, dicen ambos, los jóvenes afroamericanos, por primera vez en sus vidas, se sintieron libres y respetados. Así se lo cuenta a Yates un compañero: “A veces un pueblo entero acudía a verme cuando sabían que había llegado un negro. España fue el primer lugar donde me sentí libre”. La otra gran coincidencia mutua, que define la implicación de todos ellos, es la repercusión que tuvo en la comunidad negra la invasión en 1935 de Etiopía por Mussolini, aliado activo de Franco contra los demócratas españoles. Ellos sintieron visceralmente la amenaza que suponía Franco y el fascismo para el progreso y los derechos de los trabajadores del mundo. Les sublevaba el racismo nazi y su actitud imperial colonialista. La identificación de la Falange con el terror racista sureño es habitual. “Dadle a Franco una capucha y podría ser miembro del Ku Klux Klan. El fascismo es lo que será el Ku Klux Klan cuando se combine con la Liberty League y empiece a utilizar aviones y ametralladoras en vez de unos cuantos metros de cuerda”, escribe Hughes.
La mirada de Langston Hughes se concentra en los negros brigadistas y los moros franquistas. Traza fantásticos retratos de personajes y su quehacer bélico, los rescata del anonimato para la historia. Le intriga la presencia de marroquíes en el bando franquista, su comprensión de lo que sucede, la reacción de los españoles hacia ellos. Elabora así una nueva visión del conflicto. Sus pinceladas sobre la cotidianidad son agudas y apasionadas, escribe líneas de caluroso homenaje al pueblo que resiste, teñidas siempre de humor. Ydesmitifica los intelectuales con los que convive en el frente y en la retaguardia: Alberti, Maria Teresa León, Bergamín, Miguel Hernández, o Malraux y Hemingway. Es memorable, y muy actual, la crítica que hace al “turismo revolucionario” de los artistas que aparecen por el frente. Su narración va más allá de la política, aprovecha para traducir a Lorca y, como buen artista de Harlem, se deja llevar por su pasión por el flamenco, los toros, la vida nocturna y bohemia, aportando detalles inéditos de la vida cultural bajo las bombas.