Falsa verdad
Una distopía sobre Barcelona que ha eliminado la disidencia
Dos de las tres novelas que la joven editorial Periscopi presenta como novedades para el otoño (una de M. Dolors Millat y esta de Maiol de Gràcia) son utopías negativas que presentan una sociedad controlada y unos escritores considerados peligrosos, integrados en la resistencia antisistema. Transmiten el sentimiento de vivir en un mundo controlado, asfixiante, y la necesidad de enfrentarse a él a través del acto liberador e individual de escribir. Y, tal vez, a través de la escritura, incidir en la conciencia global. Sin embargo las cosas no son tan sencillas, y, al menos en el caso de La peixera, se filtra una reflexión sobre hasta qué punto el escritor hace el juego a los que mandan y tras la pantomima de la clandestinidad engagé está tan feliz de cómo le van las cosas.
Maiol de Gràcia Clotet (Barcelona, 1972) debuta con esta novela. Licenciado en filología inglesa (en La peixera se habla borrosamente de una estancia en Estados Unidos que determinó la vocación del protagonista), profesor de secundaria, algunas de las últimas historias que ha escrito se pueden leer en el portal joescric.com. Es hermano del Roger de Gràcia de la tele, pero no tiene más importancia.
En Emulsió de ferro y Emet i la revolta de Sebastià Jovani y El re-