La Vanguardia - Culturas

Finney, Alda, Darín...

-

sodios de esta segunda temporada y lo hicimos en tres meses: no puedo hacer teatro mientras ruedo. Si se decide que hay una tercera, ya habrá acabado

J.M.P. Se me cae la baba ante tu personaje.

F.O. Ha enganchado tanto a jóvenes como a mayores. Cuando grabábamos ya se veía que el material era bueno, pero el éxito ha sido una sorpresa. Es un personaje con el que me he sentido muy cómodo, porque creo que tengo bastantes cosas en común con él y eso me ha permitido apropiárme­lo. Y está muy bien, además, que sea un profesor de filosofía. J.M.P. La filosofía también nos une. Tú haces y yo interpreto a Sócrates en el teatro.

¿Francesc Orella se atrevería a dar el salto a la dirección como hizo Pou?

F.O. No. No me siento preparado. J.M.P. Hasta que te pase lo que me pasó a mí cuando me enamoré de

Yo también decía que ser actor era lo máximo que se puede ser. Y me Josep Maria Pou, fuente inagotable de noticias sobre las tablas internacio­nales, se muestra satisfecho de que regrese este diciembre al Old Vic de Londres. El texto debutó en octubre de 1996 interpreta­do por Albert Finney, Tom Courtenay y Ken Stott y se mantuvo ocho años en cartel. Y es para recordar aquel éxito que vuelve ahora al Old Vic, protagoniz­ado por otro trío de excepción integrado por Paul Ritter, Tim Key y Rufus Sewell. Muchas han sido las ternas de lujo que han desfilado por el cartel de En Broadway, la representa­ron Alan Alda, Victor Garber y Alfred Molina. Mientras que Jean-Louis Trintignan­t y Jean Rochefort se incorporar­on en 1998 a la gira francesa del montaje junto a Pierre Vaneck, quien ya lo había estrenado en el teatro de los Campos Elíseos en un montaje producido por Sean Connery.

Luis Merlo, Iñaki Miramón y Álex O’Dogherty; y Enrique San Francisco, Javier Martín y Vicente Romero han integrado otros repartos españoles de este texto que también compitió en nuestra cartelera con la producción argentina, interpreta­da por Ricardo Darín, Óscar Martínez y Germán Palacios. enfadaba cuando la gente me decía que diera un paso más, que estaba preparado.

F.O. Pero, ¿por qué la dirección es

J.M.P. Exacto. No es un paso más. ¿Por qué ha de serlo? He trabajado con muchos directores que no sabían qué se traían entre manos. Y siempre llega el momento en que el director se va y nosotros nos quedamos. F.O. Con la edad vas formándote un criterio. Y ahora, si no comparto la visión del director, no puedo ser obediente. Lo era más de jovencito. Soy disciplina­do pero con quien tiene las ideas claras. Cada vez me cuesta más callarme lo que pienso. J.M.P. Cuando el director me pide algo que creo que va en contra de mi personaje, se lo discuto. Yo he abandonado­dosmontaje­spordesave­nencias con el director.

F.O. Hay un tipo de directores que se preocupan por dibujar la puesta en escena y otro a quien le interesa dirigir a los actores. A hacer dirección de actores sí que me atrevería. J.M.P. En televisión funciona esa distinción entre director técnico y actoral. Yo querría reivindica­r la capacidad de creación del actor y su enorme responsabi­lidad en el éxito de un espectácul­o, porque muchas veces se le adjudica todo al director. F.O. En los ensayos, el actor es capaz de encontrar matices que el director no percibe. El actor tiene que ser un elemento activo.

J.M.P. Y el director ideal es aquel capaz de recoger ese matiz que el actor ha propuesto.

F.O. Hay que apostar por el no por la imposición. Y en somos creadores. J.M.P. Durante los dos años que interpreté la función, siempre pensé que nos dejábamos cosas en el tintero, que había más para seguir buscando. y los actores

¿Tan bueno es este texto que no se acaba?

J.M.P. Parece sencillo, pero no lo es. F.O. Habla de relaciones humanas y eseesuntem­aquenuncas­eacaba.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain