Otro Romeo, otra Julieta
“El amor imposible no acontece solamente en personas bellas, con carrera universitaria y un trabajo envidiable”, opina el director teatral Tony Casla. Por eso mismo ha puesto en escena un Romeo y
Julieta diferente. En esta versión el protagonista femenina padece Asperger y el personaje masculino sufre síndrome de Tourette con un bajo nivel de autismo. Su relación, en la sociedad actual, les obliga a enfrentarse a obstáculos similares a los que separaban a Capuletos y Montescos. El montaje, que se ha representado ya en Buenos Aires y el 2018 pasará por México y Perú, recala todos los sábados de diciembre en el Teatro Porta 4 de Barcelona, en Gràcia.