Literatura en tiempos de guerra
MAURICIO BACH
Veinticinco años después de su publicación, aparece una nueva edición revisada y aumentada de Las armas y las letras, un libro que en su día aportó una sugestiva mirada alejada de dogmatismos sobre la Guerra Civil y los escritores de ambos bandos. Conversamos con Andrés Trapiello (Manzaneda de Torío, 1953) sobre cómo fue recibida entonces la obra y cómo ha evolucionado durante estos años la visión de la Guerra Civil.
¿Qué supuso la publicación de la primera edición del libro en 1994?
Personalmente, mucho: ponía en orden ideas que andaban un poco sueltas en mi cabeza, aunque en general claras: los que habían ganado la guerra habían perdido los manuales de literatura, y, por lo mismo, a muchos de los que la habían perdido, se les concedía un pedigrí literario poco real. Mi propósito fue advertir esto, indagar en los comportamientos políticos de los intelectuales durante la guerra, no siempre ejemplares, e invitar a los lectores a que juzgaran por sí mismos a algunos escritores denostados u olvidados, de Pla a Panero, de Chaves Nogales a Gaziel.
¿Hubo reacciones en contra? ¿De qué tipo?
Bastantes, la verdad. Los sublevados habían ganado la guerra desde el primer día, y desde el primer día los republicanos se hicieron con el control de la propaganda, lo que hoy decimos “el relato”. Este relato caló tan hondo que aún hoy pervive. Los que habían perdido la guerra no se resignaban a tener que perder también un relato que aseguraba que los mejores intelectuales y escritores estuvieron del lado republicano. Lorca, Machado, Juan Ramón o Cernuda son en Andrés Trapiello, el autor de ‘Las armas y las letras’ efecto de primer orden. ¿Pero Ortega y Gasset, Baroja, Azorín o Cunqueiro no? A las reticencias políticas, se sumaron las del mundo universitario, bastante tontas: el libro va sin notas, un delito, al parecer, de lesa gravedad entre académicos.
¿Qué supuso el premio Don Juan de Borbón de La Vanguardia?
El libro fue un encargo de Rafael Borràs para el premio Espejo de España. Las circunstancias torcieron el plan, pero el libro y su autor salieron ganando con el Don Juan de Borbón, creo. El libro, porque el premio estaba al margen de intereses comerciales y editoriales, y su autor, porque inició entonces una colaboración semanal en el Magazine de La Vanguardia, que dura hasta hoy, esta sí muy importante para mí.
¿Cómo ha cambiado en estos 25 años la visión de la Guerra Civil?
Se ha admitido al fin que a la mayor parte de los españoles se les obligó a elegir entre dos Españas, y a menudo a la fuerza. Los vencedores de la guerra fueron la Falange Española y el Partido Comunista. Al empezar la guerra tenían unos veinte mil militantes. Al final, dos millones cada