Prometeo llega en un cochazo
El realismo mágico nace en Europa y triunfa en América: Ramon Mas ve la mano de Ramon Vinyes
Bromistes, tramposos i mentiders. Antologia del realisme màgic català. 1923-1945,
de Ramon Comas, es un libro lleno de ideas brillantes. Pone sobre el papel, como nunca antes se había hecho, el papel que han tenido los escritores catalanes en el realismo mágico. Con Massimo Bontempelli (1878-1960) ha pasado como con Woody Allen: ha sido un autor queridísimo en Barcelona. Con muy poca cosa: el estreno de la obra de teatro Nostra Dea,
con Margarida Xirgu (1927), una edición incompleta de La dona dei miei sogni
(1935) y dos conferencias en 1935: sobre teatro y sobre la Tercera Época de la cultura europea, la etapa moderna que superaba los periodos clásico y romántico.
Bontempelli provocó un gran impacto en Agustí Esclasans y en los jóvenes Pere Calders y Josep Palau i Fabre y, junto a Jean Cocteau, se encuentra detrás de los experimentos y las gamberradas de Francesc Trabal, Joan Oliver y la Colla de Sabadell. Ramon Mas sostiene que esta influencia de Bontempelli conecta con una línea temperamental de la cultura popular catalana. Y se proyecta, gracias a la figura de Ramon Vinyes, emigrado y exiliado en Colombia, en el realismo mágico de
García Márquez y el grupo de Barranquilla. Por eso la antología empieza con cuentos de Apel·les Mestres, Lluís Capdevila y Josep Carner, anteriores al estreno de la Nostra Dea de Margarida Xirgu, que popularizó a Bontempelli (de quien, anteriormente, en 1926, se había publicado el cuento El bon vent en D’Ací i d’Allà, traducido por Agustí Esclasans). Sigue con La venus ortopèdica del vanguardista Carles Sindreu y culmina con cuentos poco conocidos de Àngel Ferran, Joan Sacs y Elvira Augusta Lewi, y otros, famosos, de Espriu, Trabal, Calders y Oliver que preparanlatracafinal:doscuentosdeRamon Vinyes, uno de tema tropical y el otro, un misterio en Berga.
A diferencia de los autores de la anterior antología de Ramon Mas (Savis, bojos i difunts), que reunía a simbolistas y decadentistas, aquí todo es de broma. Hay muchas historias de muertos y resucitados que enlazan unas con otras. La selección es excelente y da gusto leerla. Tiene un punto álgido en los relatos de Espriu, Calders y en uno de los Tres arguments de Trabal, que pasa en el circo, protagonizado por un transformista que cambia constantemente de personaje. Es sensacional. També me ha gustado mucho el cuento de Carner, que no recordaba, El Prometeu dels llumins: con los derechos de explotación del fuego, Prometeu se ha forrado y conduce un cochazo. Da una conferencia en el Ateneu sobre las cerillas pero las desprecia: ¡que un logro glorioso termine en manos de las cocineras! Carner se burladelagentequediceunacosayhaceotra.
Más allá de la teoría y práctica del realismo mágico, Bromistes, tramposos i mentiders es una gran reivindicación de la narrativa de vanguardia. A veces me caen libros en las manos plomizos, retóricos, interminables. Y pienso: ¡pero si esto Bontempelli, Cocteau, Pirandello, Trabal, Espriu y Calders ya lo habían resuelto! Y de qué manera: alta carga conceptual, brevedad, ritmo trepidante, encadenamiento vertiginoso de hechos y personajes, desaparición de los límites entre lo cotidiano y lo sobrenatural , entre la realidad y el lenguaje. Este libro es una inmersión gozosa en esta manera de hacer las cosas tan estimulante y agradecida paraellector.
Ramon Mas Bromistes, tramposos i mentiders. Antologia del realisme màgic català. 1923-1945
MALES HERBES. 183 PÁGINAS. 19 EUROS