Fotos de Colita en la Bienal sevillana

La Bienal de Sevilla 2022 invita desde su cartel a debatir sobre la evolución del flamenco en el siglo XXI, en un momento en el que, según su director, Chema Blanco, “se está produciendo un relevo… un intercambio generacional”. La presente edición se anuncia con una fotografía de la sevillana Antonia Moreno que reinterpreta una imagen mítica de Colita.

En 1969, Colita viajó a Andalucía para ilustrar Luces y sombras del flamenco, de José Manuel Caballero Bonald. En Sevilla captó la fotografía El bar del Pinto, en la que aparecen Antonio Mairena, Pepe Pinto, Chocolate y Torres, representantes de una época dorada del flamenco en la que mandaban el cante y los hombres. Antonia Moreno la ha recreado, por invitación de Colita, en una de las últimas tabernas que sobreviven en Sevilla, con las bailaoras Manuela Carrasco, Eva Yerbabuena, Patricia Guerrero y María Moreno. Fiel representación del poderío del baile y de la mujer en el flamenco del siglo XXI. “Me encanta la relectura que ha hecho”, señala Colita.

La Bienal muestra además por primera vez la serie completa de esa fotografía en una exposición, Archivo Colita, que reúne más de un centenar de imágenes de la fotógrafa barcelonesa. Además de la sala dedicada a su viaje por Andalucía y otra a Ocaña, la exposición se abre con Mundo gitano, la parte más novedosa, en la que más del 90% de las imágenes son inéditas. La sala reúne fotografías en poblados gitanos del Somorrostro y Montjuïc en los años 60. Los niños y las mujeres son los protagonistas de la selección, que descubre imágenes desconocidas, como la de un jovencísimo José Menese cantando en la puerta de una chabola gitana.