La tensión cotidiana
Varias autoras exploran la maternidad, la sexualidad y el cuerpo, los vínculos familiares y las heridas del pasado que conforman su día a día como madres, hijas y profesionales en un sistema social y laboral que no deja de cuestionarse
De un tiempo a esta parte, las escritoras están abriendo puertas literarias que les permiten exponer aspectos del mundo que antes no se mostraban de la misma manera. La oportunidad de explorar la sexualidad y el deseo desde una perspectiva femenina, de hablar de la maternidad desde un punto de vista que rompe la visión tradicional del concepto o de plantear abiertamente el dolor, el trauma y el horror de la violencia de género con todos sus matices son algunas de las posibilidades que nos ofrecen las miradas femeninas.
Un ejemplo de esta tendencia podría ser Lisa Taddeo y su libro de no ficción Tres mujeres (Principal de los Libros, 2020), donde explora del deseo femenino, o la novela Una historia verdadera, de Kate Reed Petty (AdN, 2021), que se adentra en la historia de una acusación de abusos para reflexionar sobre el relato que nos explican y el que nos explicamos; o la más reciente Vista Chinesa ,de Tatiana Salem Levy (Libros del Asteroide, 2022), una historia abrumadora donde vemos el horror de una violación, sus consecuencias y la lucha para intentar superarlo.
Ya hace años que las estanterías de las librerías se llenan de autoras que escriben en catalán y que tratan estos temas, y este año no ha sido una excepción. Autoras como Blanca Llum Vidal, que ha decidido sumergirse en el concepto del amor y el deseo a través de una historia epistolar en la que solo escribe uno. La princesa sou vos, publicada por Club Editor, dialoga con el feminismo y con la feminidad, y nos habla de obsesiones, de contradicciones o de la forma en que entendemos los roles dentro de una relación.
Si seguimos con el concepto de novela epistolar, podemos encontrar Els possessius , de Jenn Díaz (Amsterdam), una historia en la que la autora navega por la cotidianidad de la vida y de los cambios. Mientras que en la novela de Blanca Llum Vidal las cartas son de una única persona, aquí nos topamos con una red de relaciones en la que se reflexiona sobre el amor, la feminidad, el deseo, el resentimiento o los vínculos familiares.
Leticia Asenjo nos habla de divorcio y relaciones en Divorci i aventura, publicada por Segona Perifèria, una novela donde la autora explora, con humor, la vida después del divorcio para reflexionar sobre sexualidad, deseo y la manera en que nos relacionamos actualmente. También encontramos divorcios en Sis mesos d’hivern, de Marta Buchaca (Navona), una novela situada en una Barcelona paralizada por la pandemia donde asistimos a la separación de una mujer y las consecuencias emocionales que eso conlleva.
La maternidad como espacio para la reflexión
Indagación sobre la conexión entre cuerpo y mente, entre humanidad y animalidad primigenia
Maternidad como espacio para la reflexión sobre la realidad y las dificultades que van ligadas a ella
Otro tema que ya hace años que llena nuestras librerías y que nos está permitiendo observar una diversidad que hasta ahora era invisible es el de la maternidad. La maternidad en sí misma, pero también como espacio donde reflexionar sobre la realidad actual, sobre los problemas sociales, laborales y económicos que van ligados a ella.
En L’instant abans de l’impacte ,de Gloria de Castro (Edicions del Periscopi), novela ganadora del premio Llibreter, la autora nos demuestra, a través de un diario cargado de ironía, cómo la maternidad puede ser una puerta para reflexionar sobre relaciones, sobre nuestro sistema social y laboral y, a su vez, hacer una crítica a la sociedad de consumo.
Una manera curiosa de hablar sobre la maternidad es la que propone Distòcia ,de Pilar Codony (L’Altra Editorial), el premio Documenta de este año. Pilar Codony se adentra en el mundo rural para reflexionar sobre la convivencia entre especies y sobre la maternidad. Aquí encontramos embarazos, partos complicados, abortos, decisiones difíciles y una exploración sobre la conexión entre cuerpo y mente, entre humanidad y animalidad.
Si hablamos de animalidad y maternidad, salvando ciertas distancias, también nos podemos acercar a Mamut ,de Eva Baltasar (Club Editor), la novela que cierra la trilogía que empezó con Permagel ,yenla que encontramos una mujer que busca conectar con cierta animalidad primigenia. Esta historia, marcada por una protagonista que quiere huir de la ciudad y la sociedad, también nos ofrece un replanteamiento del concepto de maternidad.
Otra novela que quiere pensar sobre este concepto es Les altres mares,de Laia Aguilar (Columna). La autora aquí nos propone observartrestiposdematernidadesnoreconocidas a través de la historia de tres mujeres “no madres”, aunque cada una de ellas ha vivido a su manera una maternidad. Aquí encontramos el duelo perinatal, la gestación subrogada o historias que nos hablan sobre cómo se construyen los vínculos entre madres e hijas.
El cuerpo, la violencia y el trauma
Otro de los otros temas que las escritoras están explorando últimamente a través de la ficción y la no ficción es la violencia, la física y la emocional, que las mujeres sufren por el hecho de ser mujeres, y la culpa, la vergüenza, el miedo y el horror que las acompaña.
Una de las novelas de este año que trabaja este tema es el último libro de Marta Carnicero, Matrioixques (Quaderns Crema), una historia abrumadora que nos habla de la violencia contra las mujeres como arma de guerra. A través de la historia de Hanna y Sara exploramos el dolor de las heridas del pasado, la búsqueda de la identidad y los vínculos familiares, sin olvidar el horror de la humillación, del cuerpo roto, de la persona que necesita rehacerse de nuevo, si es capaz.
También Aina Gatnau, con su debut literario Canviar de pell (La Magrana), ha querido explorar un episodio traumático que hace que la protagonista de su historia tenga que huir de casa para volver a empezar.
Historias sobre abusos y dolor, sobre deseo y desencanto, sobre maternidades y decisiones. Un amplio abanico que nos invita a descubrir la diversidad y la profundidad de estas miradas.