Los fondos recuperan terreno
Catorce de las 23 gestoras que cuentan con un patrimonio superior a los 1.000 millones de euros han logrado cerrar el mes de febrero con suscripciones netas en sus patrimonios. Es decir, las entradas de dinero procedentes de los inversores han superado a las salidas. En las cuatro gestoras más grandes, sin embargo, los inversores siguen sin apostar por los fondos de inversión como instrumento preferido a la hora de colocar el dinero.
Estas cifras confirman el giro que se ha estado produciendo en el conjunto de los fondos de inversión españoles durante las últimas semanas, después de cinco años en el curso de los cuales el sector se ha ido vaciando de dinero, en buena medida por la agresividad con las que se han comportado los productos alternativos, en especial los depósitos bancarios. Una re- ciente encuesta pone de relieve que el 88% de los inversores realiza sus operaciones de compra o venta de fondos de inversión a través de las oficinas bancarias. De este elevado porcentaje se puede deducir la gran influencia que tienen las oficinas a la hora de influir en las decisiones de inversión de sus clientes.
Si la colocación de depósitos bancarios ha sido la estrategia preferente en estos dos o tres últimos años, es lógico que las oficinas bancarias sean los principales impulsores de los productos rivales de los fondos y que por este motivo los fondos de inversión hayan padecido una sequía importante, suplantados por los depósitos bancarios. Bancos y cajas de ahorros buscaban, sobre todo,
La mayoría de las gestoras logró más entradas de dinero a sus fondos de inversión que reembolsos
liquidez y los fondos de inversión no son el mejor instrumento para ello.
Pero las dos subastas de liquidez que ha realizado reciente- mente el Banco Central Europeo parecen haber contribuido a cambiar gradualmente la situación. Para los bancos, la obtención de liquidez a través de sus oficinas mediante depósitos de alta rentabilidad ya no es la prioridad, sobre todo si el Banco Central Europeo proporciona dinero sin límite al 1% de interés y a un plazo de tres años.
Algunos analistas consideran que este cambio en las políticas bancarias, junto a una mejora gradual en los mercados –sobre todo en los de renta variable–, puede dar paso a una etapa de mayor esplendor para los fondos de inversión. De todos modos, es de esperar que los inversores actúen con cautela en estos primeros momentos posteriores al cambio de perspectiva. Por otro lado, los productos garantizados serán, previsiblemente, los que se sigan beneficiando del interés de los inversores por los fondos.