Los MBA se replantean su futuro
Las escuelas de negocios estudian cómo mejorar sus másters más prestigiosos y cotizados
Los másters en administración de empresas, más conocidos por sus siglas en inglés, MBA, han sido siempre un referente académico y también para las empresas, que acuden cada año a las mejores escuelas de negocios para reclutar futuros directivos. Cada año miles de jóvenes en todo el mundo invierten sumas considerables –el precio de un MBA puede superar los 60.000 euros en algunas escuelas– para cursar estos programas. La cifra de alumnos ha logrado mantenerse estable en Europa pese a la coyuntura económica, pero la crisis ha obligado a las escuelas de negocios a hacer autoanálisis. ¿Responden sus MBA a las necesidades de las empresas? ¿Están formando bien a los directivos del futuro para que sean capaces de prevenir otra crisis como la actual o, al menos, responder ante ella?
El profesor de Harvard Srikant Datar fue el primero en poner el debate sobre la mesa en el 2010 con su libro Rethinking the MBA: business education at a crossroads. En él, Datar defendía la necesidad de que estos másters aporten a los alumnos más competencias, mayor capacidad de liderazgo y una perspectiva global de los nego- cios. Datar acudió hace unos días a Barcelona para participar en una conferencia que reunió en el Iese a directivos de más de 40 escuelas de negocios de todo el mundo, con el objetivo de “repensar” los MBA y plantear cambios que ayuden a adaptar estos másters a las necesidades actuales del mercado.
“Los titulados MBA presentan carencias en tres ámbitos: el saber, el hacer y el ser”, advirtió Datar en Barcelona. Para cubrirlas, el profesor defiende que estos másters deben ir más allá de datos y teorías y “enseñar a pensar de forma crítica e imaginativa”, aplicar los conocimientos a problemas prácticos y prestar una
Según el profesor de Harvard Srikant Datar, deben enseñar a pensar de forma “crítica e imaginativa” Los expertos destacan la necesidad de formar alumnos capaces de liderar empresas en un mercado global
mayor atención al desarrollo personal de los futuros directivos y su relación con el entorno. “Muchos de los problemas y oportunidades que afrontan actualmente las empresas requieren capacidades que van más allá de las tradicionales habilidades directivas”, destaca Peter Tufano, profesor de la Universidad de Oxford.
Una de las conclusiones del encuentro fue la necesidad de preparar a los alumnos MBA para trabajar en un entorno globalizado. La receta, según el director general del Iese, Jordi Canals, pasa por “contar en las escuelas de negocios con alumnos y profesores de distintos países, fomentar el trabajo en equipo para que aprendan a afrontar los problemas desde culturas distintas, reflejar la multiculturalidad en los contenidos, y ofrecer prácticas e intercambios en otros países”.
La falta de experiencia en países emergentes es otro punto débil de los titulados MBA, según los expertos. “Es importante que los futuros directivos tengan experiencias de dirección y liderazgo en países donde no siempre hay la logística y la infraestructura a la que están habituados, lo que les obliga a innovar”, explica Canals. Una opción es incluir un módulo de trabajo en estas zonas como parte del aprendizaje. Por ejemplo, la escuela de negocios suiza IMD incluye en su MBA una expedición de una semana a Sudáfrica, donde los alumnos trabajan con pymes para proponerles mejoras tangibles. “Aprender a través de la acción es la única fórmula para enseñar ciertas habilidades” destaca Martha Maznevski, directora del MBA de esta escuela.
Otro punto en el que los MBA necesitan mejorar, según los expertos reunidos en el Iese, es enseñar a los alumnos a entender mejor la relación entre empresa y sociedad. “En Estados Unidos las empresas han sufrido una gran pérdida de reputación que también salpica a Europa –advierte Canals–. Los titulados MBA deben saber conectar con la estrategia de la empresa no sólo para ser eficientes con sus clientes sino también para responder a las demandas de la sociedad”. La crisis, en este sentido, ha demostrado la necesidad de formar a los futuros ejecutivos no sólo en términos económicos sino también “éticos y humanísticos”, apunta el director del Iese. “Debemos asegurarnos de que los MBA no pierden relevancia ni confianza pese a la crisis –señala Soumitra Dutta, profesor de la escuela de negocios francesa Insead–. Para ello debemos plantear cambios en el diseño de los másters, incluyendo más aprendizaje práctico e interactuando más con la sociedad”.