Metáforas de la cultura
La galería Javier López presenta la obra reciente del fotógrafo norteamericano David Levinthal (San Francisco, 1949), que pertenece a la colección realizada en torno al universo de la popular serie de ficción Star Wars. Levinthal estudió en la Universidad de Yale y el posgrado en el MIT de Massachusetts, adquiriendo una fuerte formación técnica que ha sido fundamental a la hora de establecer una estrategia para su dinámica creativa. Es la segunda individual que realiza en esta galería madrileña, que trabaja con nombres internacionales valorados por el mercado.
Levinthal es un fotógrafo de estudio que recrea escenarios artificiales donde los personajes están siempre representados a través de muñecos y juguetes, reflejo de una iconografía prototípica norteamericana. Su imaginario se construye sobre la base de la cultura pop: los cómics, las series de televisión y la publicidad. Los personajes que protagonizan sus composiciones remiten en un primer momento a la infancia, pero en una segunda lectura los encontramos en un ámbito adulto en el que la tecnología y la violencia son elementos fundamentales, ya que, como el artista asegura, “los juguetes no son objetos benévolos sino metáforas de la propia cultura”.
En la serie que se exhibe en Madrid los reconocibles perso- najes y las naves espaciales se componen de pequeñas piezas de Lego que Levinthal transforma en increíbles héroes de acción imitando el estilo de las películas de George Lucas. El contraste entre las figuras y los fondos monocromos contribuye a eliminar cualquier sentido de escala, la potente iluminación hace que las máquinas intergalácticas y las armas de la secuencia resulten más intimidantes. Su característico uso de una mínima profundidad de campo y el recurso a una visión ampliada mediante una toma muy cercana aportan vida a los objetos situados en primer plano. Sin embargo, las huellas de la estética Lego no han desaparecido completamente, el espectador es consciente de que se trata de una representación irreal.
En lugar de las polaroids con las que ha obtenido reconocimiento internacional, la técnica elegida por Levinthal para estas fotografías es la impresión de pigmento sobre papel fotográfico. Desde el 2007, viene utilizando una cámara Hasselblad que le permite visualizar las imágenes mientras está trabajando en ellas, corrigiéndolas de forma inmediata para posteriormente procesar los archivos digitales y hacer pruebas de estudio, método parecido al trabajo con la Polaroid.