Valor es calidad a buen precio
“En mi opinión, el concepto de calidad como tal no creo que deba replantearse, lo que si conviene asegurar es que la calidad de los productos y servicios se ajuste a las nuevas expectativas que emanan de un mundo global y complejo. Sin duda, las expectativas actuales son diferentes y este hecho conlleva que las organizaciones de hoy necesiten como mínimo disponer de sistemas de gestión flexibles, con personas capacitadas y totalmente orientadas a añadir valor al cliente", dice Josep M. Costa. Por su parte, Roger Grané añade un matiz. “Cuando una empresa tiene un sistema de gestión de la calidad ya consolidado, puede ocurrir que la calidad quede reducida a seguir unos procedimientos establecidos con el fin de cumplir con unos requisitos normativos” y alerta que “si el mantenimiento del sistema de gestión de calidad implica más burocracia que valor añadido, sí hace falta replantearse permanentemente el concepto de calidad”. Mientras, Antonio Castillejo recuerda que “estamos en un mercado de demanda, en el que hay un exceso de producción de bienes y servicios y lo escaso son los clientes. ¿Qué piden los clientes? Piden valor por su dinero, de otra forma si su dinero tiene más valor que lo que va a comprar, no comprará. Y ¿qué es valor? Valor es calidad a buen precio”. Con respecto a la calidad, afirma que no debe replantearse en absoluto su concepto, aunque “lo que habría que replantearse es lo qué debemos hacer para que no se nos olvide hacer las cosas bien”.