¿DE IZQUIERDAS O DE PROGRES POR LA VIDA?
Nuestro país podría ser pronto ingobernable porque los partidos de izquierdas no quieren estar en la Generalitat. Los que votamos opciones de izquierdas lo hacemos porque pensamos que es la mejor manera de ayudar a los desfavorecidos y de implementar políticas sociales progresistas. Pero da la impresión de que a muchos políticos de izquierdas les preocupa más ir de progres por la vida que hacer algo realmente útil por la sociedad. Un partido de izquierdas debería ver el resultado registrado en las elecciones catalanas como una gran oportunidad para influir –desde dentro– en las medidas de austeridad.
Un partido de izquierdas debería estar a favor de reducir el déficit público, igual que lo estuvieron los socialdemócratas suecos y alemanes cuando ellos tuvieron una crisis fiscal. El Estado de bienestar debe poder endeudarse cuando las cosas van mal, pero si el déficit público es demasiado alto, como lo es aún, se generan dudas acerca de la capacidad de devolver los préstamos y nadie te da dinero prestado. Por ello, hay que reducir el déficit para poder mantener el Estado de bienestar.
Una política de izquierdas buscaría reducir el déficit recortando gastos superfluos o ineficientes, recaudando con impuestos eficientes y progresivos. Por ejemplo: ciertamente se equivocó CiU al abolir el impuesto de sucesiones en plena crisis, pero fue aún más increíble que el tripartito redujese
Hay que poder reducir el déficit para poder mantener el estado del bienestar
drásticamente ese impuesto unos años antes. Habría que recuperar el impuesto de sucesiones como estaba antes, recaudaba alrededor de ¡mil millones al año!
Se pueden reducir gastos en consejos comarcales, diputaciones, recogida de basuras diaria, y un largo etcétera. Hay muchos catedráticos de universidad mayores de 50 años que nunca han hecho investigación y que nunca están en la universidad. Son carísimos, habría que retirarlos. En su lugar se podría contratar profesores jóvenes, más baratos y más preparados. Se puede hacer lo mismo en la enseñanza primaria. Dado que la gran mayoría de profesores y maestros hacen un trabajo excelente habría que evaluar a profesores y maestros para retirar solamente a los más ineficientes. Me temo que los pro-
¿Es de izquierdas apoyar transferencias incondicionales cuando sabemos que no funcionan?
gres estarán en contra de la evaluación de maestros y profesores y, en consecuencia, preferirán dejar sin oportunidades a los jóvenes.
Hay que evitar la exclusión social. Pero sabemos que las transferencias incondicionales de dinero no evitan el subdesarrollo ni la exclusión. Lo que realmente funciona y es útil son las transferencias condicionales, por ejemplo, exigiendo a las familias receptoras de un subsidio que mantengan a los niños en la escuela. Si el niño no va a la escuela no hay renta mínima de reinserción. ¿Es de izquierdas apoyar transferencias incondicionales cuando sabemos que no funcionan?
Se puede señalar con el dedo el brutal desperdicio que se produce en tantos y tantos ámbitos de la administración central. Ahí están una serie de ministerios sin competencias, programas de desarrollo fracasados, obras carísimas que no sirven para nada, una TVE muy costosa que repite los contenidos que el mercado proporciona gratis ... Un gobierno catalán de izquierdas denunciaría este desperdicio a la Unión Europea, dado que es causante de la crisis de la deuda y dado que, en buena parte, lo pagamos todos nosotros.
Se pueden hacer tantas cosas estando en el Gobierno... Pero me temo que los partidos de izquierdas catalanes preferirán ir de progres por la vida.