LAS OPAS YA HAN DESPERTADO
Son diversos los motivos que empujan a los mercados bursátiles a seguir subiendo. En primer lugar, pese a la fuerte revalorización de las bolsas de los últimos meses, las cotizaciones siguen muy rezagadas respecto a los beneficios empresariales y no reflejan adecuadamente los valores fundamentales de las empresas, muy superiores.
En segundo lugar, la gran mayoría de estrategas, según las compilaciones de recomendaciones efectuadas, no han ni siquiera intuido el movimiento alcista y están actualmente sumidos en plena rectificación de criterios, aumentando progresivamente sus recomendaciones de adquisición de acciones.
En tercer lugar, una gran mayoría de gestores de inversión profesionales, según las encuestas publicadas, se han visto igualmente sorprendidos por la subida, manteniendo unas posiciones en renta variable sensiblemente inferiores a las que sus mandatos de gestión les facultan. Estos están iniciando un flujo comprador, en lo que constituye un incipiente trasvase desde posiciones de renta fija hasta posiciones de renta variable, con visos de ser duradero.
Finalmente, en cuarto lugar, las ofertas de adquisición de empresas cotizadas u opas han despertado ya.
En estos momentos hay, en todo el mundo, 289 opas en curso, de las cuales 117 en Norteamérica, 56 en Europa occidental, 92 en Asia, 12 en Europa del Este, 7 en Oriente Medio y África, y 5 en Latino América. El ritmo de presentación de estas ofertas está creciendo, en los meses de junio y julio se presentaron un promedio de 0,7 opas por día y en los meses de agosto y septiembre un promedio de 1,1 por día. En los meses de octubre y noviembre el promedio ha subido a casi 2 por día. ¿Por qué se efectúan ahora más opas?
Para cualquier inversor a largo plazo es el momento ideal. Por una parte, los mercados se hallan ya lo suficientemente lejos de los registros mínimos que alcanzaron en los últimos años y las volatilidades de mercado son lo suficientemente bajas como para certificar la ausencia de nervios entre los inversores. Por otra parte, pese a la subida, las empresas siguen cotizando muy baratas, por lo que aún pagando primas elevadas por las mismas, el comprador realiza excelentes operaciones. En otras palabras, la situación actual per- mite a los inversores de largo plazo adquirir empresas con una opa pagando más de lo que cotizan y menos de lo que valen.
Conviene alertar al inversor sobre los precios de algunas de estas opas, especialmente las que son llevadas a cabo por los accionistas principales de la empresa, en cuyo caso pueden ser demasiado bajos. Un ejemplo lo tenemos en Vueling, que ha sido opada por su mayor accionista, IAG (fusión de Iberia y British Airways), al precio de 7 euros por acción, un 28% por encima de su última cotización. Este precio supone valorar Vueling a unos 209 millones de euros.
Se trata de un precio muy bajo atendiendo a dos conceptos. El primero son los beneficios previstos de Vueling, unos 17 millones de euros este año y unos 22 millones el 2013, que justificarían a nuestro entender un valor de empresa superior a los 300 millones de euros. Y, en segundo lugar, la elevada caja neta de que dispone Vueling, de 406,6 millones a 30 de septiembre, prácticamente el doble que el montante ofertado.
¿No debería Vueling retribuir al actual accionista con un generoso dividendo, como mínimo equivalente a su caja extrafuncional, antes de ejecutar la opa? ¿O bien se pagará ese dividendo después de la opa, como se hizo en el caso Amadeus? Vueling no es ciertamente Amadeus, esta última era un líder mundial dentro de un sector oligopolístico, mientras que Vueling ocupa un lugar muy discreto, muy alejada de la mayor línea aérea europea, Ryanair, con un valor en bolsa de 6.800 millones de euros. Aún así, cabe recordar que los minoritarios son tan accionistas como los mayoritarios.
Un ejemplo de opa bien hecha ha sido la que ha efectuado esta misma semana la holandesa Boskalis sobre Dockwise. La acción cotizaba a 10,66 euros y ha ofertado 17,2 euros, un 61,4% más. Ambas comparten un socio principal, HAL , lo cual no ha impedido que el precio haya sido satisfactorio para el accionista minorista. La compañía que ha presentado la oferta, Boskalis, no ha bajado pese al precio pagado, sino que su cotización ha subido. Ha creado valor para sus accionistas.