El triángulo dorado portugués
El precio de las propiedades de lujo en Algarve ha caído en un 30% en los últimos cuatro años
Con los termómetros rozando los cero grados y las Navidades asomando las orejas, son muchos los que empiezan a soñar con unas merecidas vacaciones lejos del ruido mundano de la gran ciudad, rodeados de palmeras, un sol resplandeciente y con un delicioso cóctel entre sus manos para despedir otro año que llega a su fin.
A pesar de no encontrarse en el Caribe, la sureña localidad portuguesa de Algarve es, sin duda, una de las opciones navideñas más barajadas por ingleses, holandeses y alemanes, atraídos por sus agradables temperaturas, la tranquilidad que se respira y la oportunidad de practicar deportes como el golf durante los 365 días del año. Para los incondicionales del mar, Algarve seduce con una irresistible puesta de sol, un nítido cielo azul y un clima soleado durante todo el año.
Aunque si existe un lugar predilecto para los amantes de la exclusividad y el lujo en Portugal es el ya denominado Golden Triangle (Triángulo Dorado), conformado por las selectas urbanizaciones Quinta do Lago, Vale do Lobo y Almancil, donde conviven decenas de hoteles y restaurantes de lujo, impresionantes playas –algunas de ellas de acceso privado–, más de quince campos de golf y algunas de las villas privadas más exclusivas de todo el país.
La zona, ubicada a tan sólo 20 minutos del aeropuerto de Faro, se ha convertido en el destino vacacional de celebridades de medio mundo, como, por ejemplo, el matrimonio Beckham, la cantante Nelly Furtado o el eterno rockero sir Cliff Richard, que incluso produce su propio vino –Vida Nova– extraído de los viñedos que rodean su espectacular villa privada. “El perfil de los compradores de propiedades en el Triángulo Dorado son familias adineradas, sobre todo de países del norte de Europa como el Reino Unido o Alemania, que buscan en esta zona una segunda residencia donde desconectar del estrés del día a día, disfrutando del sol, una extremada privacidad y las más exclusivas comodidades”, dice Paula, jefa de equipo de la agencia Marcela Properties, especializada en la venta de propiedades de lujo en la zona.
Construida a principios de la
La localidad de Algarve es la opción navideña preferida por los ingleses, holandeses y alemanes
década de los años 60, con motivo de la continua llegada de turistas británicos de gran poder adquisitivo, Vale de Lobo es la urbanización que dio origen al Triángulo Dorado. Conformada por más de 450 hectáreas, Vale do Lobo es un laberinto de callecitas que serpentean entre decenas de villas privadas, todas ellas adornadas con unos cuidados jardines y piscinas panorámicas. Cuenta con el mayor complejo de golf de todo Portugal y con algunas de sus más preciadas playas de arena dorada, como, por ejemplo, Praia Vale do Lobo, la Praia Vale de Garrão o la do Almargem, rodeada de un frondoso pinar. Tampoco faltan las boutiques, los restaurantes y los lounge-clubs que amenizan las noches en la zona.
A pocos kilómetros de Vale de Lobo se erige la urbanización Quinta do Lago, situada en el borde de la reserva natural de la Ría Formosa. El complejo, que se extiende por 2.000 hectáreas y combina pintorescos paisajes con una amplia oferta de restauración y hasta cinco campos de golf, es considerado actualmente el más exclusivo del triángulo. La vigilancia en la zona es firme y continua, con el fin de asegurar la más absoluta privacidad a sus selectos vecinos.
Por último, Almancil es un pequeño y pintoresco pueblo, perfecto para los deseosos de experimentar la vida un auténtica villa tradicional del Algarve. Eso sí, de
Pese a que el precio ha caído un 30%, una casa en el Triángulo Dorado cuesta entre 2 y 10 millones de euros
alto standing. Tal como revela Carla Di Britto, de la oficina que la agencia inmobiliaria especializada en propiedades de lujo, Engel & Völkers, posee en Quinta do Lago, a pesar de que el precio de las propiedades en la zona ha caído alrededor de un 30% en los últimos cuatro años, para adquirir una bonita casa en el Triángulo Dorado del Algarve deberemos desembolsar entre 2 y 10 millones de euros.
“El precio de las propiedades sigue siendo alto por las múltiples prestaciones que ofrece la zona, su exclusividad y por la extrema seguridad que tiene”, añade. Según la experta inmobiliaria, los británicos seguidos de los holandeses, los belgas, los alemanes y los suizos son los principales inversores en la zona en la actualidad.