Jaime Sánchez, la pintura
Hay autores que, una vez conseguido un lenguaje, el icono que les identifica, se repiten hasta la saciedad, conservando una forma de decir. A muchos coleccionistas les gusta este proceder y acaban denominándolo estilo, se agarran al arambol de la imagen y tienen la impresión de que así pueden juzgar con más solvencia lo que observan. Otros, sin querer un estilo, saltan de aquí para allá, en busca del cómo antes que del qué, y consiguen que su trabajo tenga un leitmotiv al margen de su representación estética. Este último es el caso de Jaime Sánchez (Valencia, 1955). Estudió en la Escuela de Arte de Marqués de Cubas y en la Facultad de Bellas Artes de San Fernando. Comienza a exponer en 1973 y trece años más tarde hace su primera exposición individual itinerante por Asturias. Más adelante montará un taller docente, repartiendo ya su tiempo entre la enseñanza y pocas exposiciones, sólo doce muestras personales, contando con galardones como el primer premio de Caja Castilla-La Mancha.
Series muy dispares, desde la abstracción al expresionismo figurativo, desde el signismo a la materia, de la acritud a una lírica poética. Dos de sus series me parecen estar por encima del miento trágico, que tiene más que ver con su vida interior y con su estado de ánimo que con lo que ocurre en su derredor. Una pintura desgarrada, impactante, que tiene que ver con las pérdidas y la decrepitud, con el sufrimiento y la vejez, lo que ahora exhibe, El ser y la nada, hasta el 7 de marzo.
¿Qué da sentido a su obra? La pintura, la actitud. Haga lo que hiciere, estamos siempre ante una homenaje a la pintura, jugosa, brava o lene, henchida, exultante, dulce o amarga, tenebrosa o plácida, infernal o celeste. Técnicas mixtas sobre tela o papel.
resto: Incertidumbre , del 2004, y Blanca, del periodo 2005/06. No es una estética referencial, sino una articulación de signos y cromías con un gusto exquisito.
En 2012/14 ha vuelto a la figuración expresionista, a unos antropomorfos entre hombres y conejos –su anterior individual se titula Rabbits –, que le sirve para expresar rabia y escozor, un senti-