Marc Monzó: a la búsqueda del tesoro

No cabe duda, con un simple vistazo se advierte de inmediato una vocación esencial en las piezas del diseñador catalán Marc Monzó. Su última colección, Blank, compuesta por seis piezas de oro de 18 quilates –que se presentó recientemente en la galería Klimt02 de Barcelona (klimt.net/gallery)–, es totalmente ilustrativa de esta posición reduccionista frente a la joya que casi es un gesto, una manipulación poco invasiva del material (oro en este caso pero otros menos nobles en otros casos), en finas planchas que se pliegan o montan con la misma naturalidad del papel y que conservan ese sabor espontáneo, como si se hubieran realizado sin apenas esfuerzo.

Estas formas geométricas simples de planos encontrados, se complican a través de sutiles efectos causados por el brillo del metal pulido y los reflejos que se derivan de él, un juego que es casi de luces y luces, si es que algo así es posible. Que la sombra también sea luz. Sin embargo, no son piezas pequeñas y discretas, son joyas con mucha pre- sencia aérea, rascan el aire como conquistando territorio y son joyas en las que aun tras su apariencia escueta se percibe ese tono de humor característico de muchos de sus diseños anteriores.

También tiene Marc Monzó un claro interés en una tradición de objeto encontrado, de ready-made. Le hemos visto un broche en forma de pequeña hoguera campestre, otros broches con temática de muros de ladrillo, uno que parece un solitario gigante, y otro más que es una réplica de unos palillos de dientes entrelazados. Lo imagino en una mesa, sin poder dejar de hacer algo con las manos, llevándose el hallazgo a casa para trasladarlo a joya. Alguna vez dijo que sus piezas no son narrativas pero sí autobiográficas… También dice, en referencia a su proceso creativo: “Colecciono objetos e imágenes reales, adquiridos de mi entorno diario. Mi estudio es una colección siempre creciente de fragmentos y piezas, tanto visibles como invisibles, que se convierten en parte de un mapa que sigo actualizando y revisando. Mi trabajo es una búsqueda del tesoro entre las cosas y las ideas para finalmente modelar en piezas de joyería lo que se desea, se desgasta, se cuestiona o se quiere”.

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COLGANTE

de oro de la colección ‘Blank’

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