Uterqüe, segunda oportunidad
La hermana pequeña del grupo Inditex, Uterqüe, fundada en el 2008, afronta una nueva etapa de crecimiento bajo la batuta de José Luis Rodríguez, antiguo director de tiendas de Massimo Dutti. La estrategia de la marca contempla la producción en proximidad y la apuesta por materiales y ejecución de calidad. “El 73% de nuestras prendas de moda se fabrican en Europa; la mayoría de bolsos en España y el ante en Italia”, explica Rodríguez. Uterqüe nació como marca de accesorios, pero ahora se ha convertido en una marca de moda. “Queremos incidir en nuestros puntos fuertes como los zapatos, y en las tiendas con la nueva imagen dedicamos un espacio exclusivo para calzado, que supone el 21% de nuestro negocio”, afirma el responsable de la marca, que el pasado ejercicio facturó 68 millones de euros, un 4% menos que en 2013. En Tordera, la firma cuenta con 55 empleados y comparte instalaciones logísticas con Massimo Dutti. Uterqüe tiene actualmente 66 tiendas después de cerrar diez el pasado ejercicio y está presente físicamente en 12 mercados y en 14 a través de internet. Tras replegarse de los mercados internacionales, la marca prepara el salto a China, y extiende su red en Europa a través de las ventas online. “Hay mercados, como Reino Unido y China, en los que no tenemos tiendas pero la marca tiene muy buena acogida”, explica Rodríguez. En China, la firma estudia la venta a través de plataformas de venta locales antes de dar el salto con tiendas. apuesta del empresario gallego por las instalaciones catalanas, junto la adquisición de marcas catalanas como Massimo Dutti o Stradivarius como estrategia de crecimiento del grupo gallego en la década de los 90. A estos factores, fuentes del sector textil añaden la estrecha colaboración con proveedores como Comdipunt de la mano de Julián Imaz, actualmente propietario de Shana, y operaciones estratégicas como la entrada en el capital de uno de sus proveedores en apuros, Fibracolor, cuyos terrenos son los que ocupa actualmente la nueva sede de Massimo Dutti.
A principios de los 90, cuando solo existía Zara, Inditex adquiriró Massimo Dutti, marca masculina de camisería, e inició así la expansión vía nuevas enseñas. Tras la adquisición de la empresa, ubicada en Badalona, la marca buscó nuevas instalaciones para afrontar la expansión y se ubicó en el polígono adyacente a Fibracolor, en Tordera, en el terreno que actualmente ocupa la sede de la enseña de lencería femenina Oshyo. En el 97, Inditex lanza Bershka y busca una ubicación próxima a Dutti; lo mismo sucede con el lanzamiento de Oshyo en el 2001. “Los criterios de búsqueda de ubicaciones de Inditex han sido básicamente prácticos”, destacan desde la compañía. Con los mismos criterios, cuando el grupo adquirió Stradivarius en el 99, se optó por instalarse en Sallent, cerca de Manresa.