Las gafas se visten de madera
Woodys Barcelona vende en más de 34 países y cerrará el año con una facturación de 1,4 millones de euros
Apesar de que la firma de gafas de madera Woodys Barcelona lleva poco más de dos años en el mercado, la idea de crearla se remonta a finales de 2011, cuando su precursor, Josep Dosta, trabajaba en una empresa de diseño y elaboración de complementos para compañías como Inditex o Pepe Jeans, entre otras. “Les presentamos una pequeña colección de gafas de sol de madera bastante rompedora que producimos y a pesar de que les encantó, no cerramos un acuerdo por un tema de precio”, explica Dosta que, tras ver, la buena aceptación que habían tenido decidió crear su propia firma de gafas y “pelear por convertirla en unamarcademoda”.
Josep Dosta convenció a su hermano Miquel de sumarse al barco e invertir sus ahorros –12.000 euros– en el lanzamiento de la marca. A inicios de 2013 producían su primera colección de gafas de visión y de sol elaboradas con diferentes tipos de madera como bambú, abedul o de skatesreciclados, y empezaban a llamar al timbre de las ópticas.
Hoy distribuye sus más de 100 referencias de producto a más de 1.800 ópticas de 34 países, siendo sus principales mercados Italia, Francia, Alemania y Grecia. De hecho, las ventas nacionales solo suponen el 15% de su facturación total. “En España la gente compra por precio, mientras que en otros mercados como Italia o Grecia, la gente valora el producto por su Woodys Barcelona, con sede en Vic, emplea a 10 personas. La empresa facturó calidad y diseño. Además, la marca Barcelona es un plus en el extranjero”, apunta el emprendedor. Woodys Barcelona, también cuenta con tienda online, aunque solo el 5% de las ventas se realiza en este canal.
En esta línea, Dosta explica que la clave del éxito consiste en haber lanzado un producto innovador realizado de forma artesanal, trabajar muy bien la imagen y comunicación del producto –moviéndola sobre todo por las principales revistas y blogs de moda– y participar en ferias especializadas de óptica internacionales como Silmo de París. “También ha jugado en nuestro favor que muchas celebridades se han prestado a llevar nuestras gafas sin cobrar, porque les gustaba nuestro producto, haciendo que nuestra firma corriese por todo el mundo”, admite Dosta. Lucen en el rostro de personajes como Andreu Buenafuente, Blanca Suárez, Cristina Pedroche o la cantante Demi Lovato, entre otras. El siguiente paso es entrar en el mercado de EE.UU. Por ello, ya trabajan con una agencia de relaciones públicas de Los Ángeles, para darse a conocer a través de estrellas de cine o cantantes del país.