Fitness social al aire libre
Practicar actividades deportivas al aire libre, en grupo, conducidas por un entrenador profesional. Es la propuesta de la startup GonnaFit, creada a mediados del 2013 por 3 jóvenes profesionales de INEF, que comercializa a través de su portal web servicios de fitness al aire libre, en distintos puntos de la ciudad de Barcelona por una tarifa mensual que no supera los 18 euros mensuales.
Adrià Buzón, socio fundador de GonnaFit, define su proyecto como el gimnasio del siglo XXI, por su componente tec- nológico y social. “El componente social es, sin duda, el plus de GonnaFit respecto a nuestros competidores; y que la gente que se apunta a actividades dirigidas, quiere conocer otras personas, cosa que en los gimnasios no ocurre de forma tan natural”, explica el emprendedor.
La startup, que se puso en marcha tras una inversión aproximada de 40.000 euros –aportados por los 3 socios fundadores y la compañía Llop Gestió de l’Esport (que controla el 60% de la star-
tup)– , cuenta con una app móvil desde la cual los usuarios pueden apuntarse a la clase que deseen, consultar qué compañeros asistirán, así como seguir las mejores físicas que van obteniendo. “Esta información nos facilita por un lado la gestión, ya que el profesor sabe en todo momento qué alumnos asistirán a su clase, y por otro, genera una fidelización y motivación entre nuestros usuarios”, añade Buzón.
Gonnafit, que ofrece 20 horas semanales de actividades, tiene actualmente más de 300 alumnos en la capital catalana, y estudia ahora llevar su metodología a otras grandes ciudades con cultura de fitness como Madrid o Valencia. También ofrece sus servicios de fitness al aire libre a hoteles y empresas, bajo pedido.
La startup trabaja ahora para licenciar su metodología de actividades al aire libre con el fin de poder venderla a los gimnasios como una disciplina a incluir en su programa de actividades dirigidas. Actualmente ha cerrado acuerdos de colaboración con 10 gimnasios catalanes