Cerrar el ciclo del agua
El proyecto Cleanleach es una acción cofinanciada por el Programa Ecoinnovation de la Unión Europea que ha buscado a una solución al problema de los lixiviados, “el agua sobrante tras el riego de plantas, que contiene elevadas concentraciones de nitratos, fosfatos y potasio que pueden contaminar los acuíferos”, explica Rafaela Cáceres, investigadora del IRTA-GIRO. “Los viveros los generan en gran cantidad”, señala la experta.
Desarrollado por el IRTA, el sistema Cleanleach es “una solución innovadora de recuperación y tratamiento de estos lixiviados que incrementa la sostenibilidad de los viveros, mejorando la eficiencia en el uso del agua y de los fertilizantes”, explica Cáceres. Este comprende técnicas de recuperación y tratamiento de los lixiviados basado en la combinación de un filtro de arena lento horizontal construido bajo la zona de cultivo y humedales artificiales contiguos a la misma. Es decir, el agua sobrante del riego (lixiviados) es recogida, filtrada y descontaminada en el humedal para su posterior reutilización para el riego. “El 80% se puede reaprovechar y el 20% restante se elimina vía el humedal”, afirma la experta.
“La tecnología Cleanleach se ha desarrollado para su aplicación en viveros, pero se pude extender a otros sectores relacionados, como son los de la arquitectura vegetal (cubiertas y muros vegetales) y el de la producción de hortalizas y flores al aire libre o en invernadero”, explica Cáceres.
Además de cerrar el ciclo del agua, el sistema tiene otras ventajas desde el punto de vista de la economía circular. En primer lugar, la gestión de los humedales incluye el corte regular de las plantas. El proyecto propone aprovechar esta biomasa para hacer
compost que puede ser utilizado dentro del vivero como sustrato para cultivar plantas en contenedor. En segundo lugar, para la desnitrificación en el humedal se ha utilizado un subproducto procedente de la producción de cervecera. Y, finalmente, el humedal, en lugar de grava, usa áridos reciclados de residuos de la construcción. Es decir, Cleanleach convierte tres residuos en recursos: la biomasa de las plantas del humedal, un subproducto de la producción de cerveza y áridos de residuos de la construcción.
El proyecto plantea la introducción en el mercado y comercialización de este sistema de recuperación y tratamiento de lixiviados.