Sin sorpresas por parte del BCE
Un entorno de tipos estables, sin nuevas bajadas a corto plazo, es positivo para el sector financiero
El Banco Central Europeo(BCE) no sorprendió a los mercados el jueves. Mantendrá los tipos en los niveles actuales salvo que las cosas se tuerzan mucho, aunque nodescartó nuevas bajadas si eso ocurriera, valoró positivamente el efecto de las medidas tomadas hasta ahora y detalló el plan de compra de deuda corporativa.
Los mercados mantuvieron un comportamiento bastante estable, sin los bandazos que vivimos en comparecencias anterio- res de Draghi. Es normal que eso ocurriera. Primero, porque el mensaje estaba bastante descontado y, segundo, porque parecen haber entrado en una fase de estabilidad.
Un entorno de tipos estables, sin nuevas bajadas a corto plazo, es ahora mismo positivo para el sector financiero. ¿El motivo? Los tipos negativos presionan fuertemente a la baja sus márgenesfinancieros, así quesituar comoescenarioplausible una rebaja adicional en el tipo de depósito se habría traducido inmediatamenteenmenoresprevisiones de beneficios, con el consiguiente castigo enbolsa. Si el crecimiento se viniera abajo, el BCE pondría en marcha nuevamente una extensión del programa, aunque preferiría no hacerlo a través de rebajas adicionales de los tipos de interés.
El objetivo más importante para el BCE es la estabilidad de precios, que en el contexto actual significa llevar la inflación hacia el 2%. La inflación podría caer en el primer semestre por el efecto escalón de los precios energéticos, pero comenzaría a repuntar en el segundo semes- tre del2016yenel2018yaseacercaría al objetivo. Si todo lo anterior se cumple, no habrá nuevas medidas.
Por otra parte, si Draghi hubiera mostrado una inclinación por nuevos recortes, habría generado pre- sión vendedora para el euro en el mercado de divisas. La actual estabilidad en los tipos de cambio ha sido fundamental para restar volatilidad a los mercados, así que eliminar ese factor de la ecuación también puede ser interpretado positivamente por las bolsas.
En renta fija, la entrada del BCE en el mercado de bonos corporativosayudaráarebajarlosdiferenciales de crédito, lo que es positivo. Esta semana se conocieron las peculiaridades de esta iniciativa, que comenzará en junio. No se comprará papel de bancos aunque sí de aseguradoras y de empresas que puedan ser propietarios de un banco, denominadas en euros, con un rating mínimo de BBB, vencimientos entre seis meses y 30 años. El emisor será una entidad establecida en el área euro o con matriz fuera de la región pero que cumpla con ciertas condiciones. Se establece un límite del 70% por emisión. El BCE publicará semanal y mensualmente la cartera del Corporate Sector Purchase Programme, es decir el volumendebonoscorporativosadquiridos en el marco del programa ampliado de adquisición de activos, pero los detalles sobre lo comprado en el primario y el secundario se harán públicos sólo mensualmente.
En definitiva, valoramos positivamente los mensajes lanzados por el BCE. Están acordes con los datos macroeconómicos y hacen hincapié en que la política monetaria debe recibir ayuda en forma de reformas estructurales y política fiscal.
En conclusión, el mensaje debería permitir continuar con el escenario de apetito por el riesgo, pero con prudencia y siempre dentro de nuestro perfil de riesgo.