La banca, un riesgo a corto plazo
Italia presenta un PIB estancado en el segundo trimestre y con problemas que requieren solución rápida
Italia no ha logrado levantar la cabeza durante el segundo trimestre del año. El crecimiento del PIB durante los tres primeros meses de 2016 fue muy débil, de apenas un 0,3% y entre abril y junio, su economía se ha estancado, al igual que la francesa.
Ahora mismo, es el país de la eurozona donde se centran todas las miradas. “Los mayores riesgos a corto plazo” están allí, constata un análisis de Oxford Economics. “La combinación de una crisis bancaria y política puede representar una seria amenaza a la débil recuperación europea”, relata.
Las entidades italianas tienen un volumen de créditos morosos por un valor de 360.000 millones de euros, con el Monte dei Paschi a la cabeza y sus cotizaciones en la bolsa han caído en picado. Con las nuevas reglas de rescate bancario que entraron en vigor el pasado 1 de enero, los primeros en asumir pérdidas en caso de insol- vencia deben ser los inversores. El Estado sólo puede acudir al rescate en última instancia y eso es precisamente lo que durante meses está intentando evitar el Gobierno del primer ministro Matteo Renzi.
Su ministro de economía, Pier Carlo Padoan, lleva meses negociando con la Comisión Europea una excepción a la regla. La gran cantidad de pequeños inversores en Italia puede suponer un riesgo para el futuro de Renzi.
Éste ha prometido un referéndum en noviembre sobre una serie de reformas constitucionales que quiere llevar a cabo y ha condicionado su continuidad a la victoria en la consulta. Su temor es que si los inversores se ven afectados quieran castigarle. Por si acaso, Renzi dejó entrever hace unos días que quizás no cumplirá su promesa.
En cuanto a las previsiones de crecimiento, el Ejecutivo italiano espera cerrar 2016 con un aumento del 0,6%, la mitad de lo previsto en un principio. El segundo semestre podría estar liderado por un ligero aumento del sector servicios.
A pesar de que durante los seis primeros meses del año la importación de Italia se ha estancado, las exportaciones de España hacia el país han aumentado un 8%, según apuntan desde las oficinas del Instituto de Comercio Exterior de España en Roma y Milán. Durante este periodo, las ventas hacia Italia han supuesto un total de 10.151 millones de euros, lo que supone un incremento del 8%, respecto al mismo periodo del año anterior. Durante el 2015, las exportaciones alcanzaron un valor de 18.669 millones, situando al país como el tercer país de la exportación española.