JOYAS LA TECNOLOGÍA APLICADA AL CUERPO
‘Uncanny Incarnations’
Joyas de Katja Prins | Galería Amaranto Joies, Barcelona | Hasta el 25 de febrero | www.amarantojoies.com | Teléfono 93-217-14-40 En realidad, la holandesa Katja Prins no es una diseñadora de joyas, más bien es una artista cuyo medio de expresión es la joyería, igual que el de otros podría ser el vídeo o la fotografía. Desde que recuerda, le interesaba la idea de expresarse libremente. Desarrollar su propio lenguaje visual y una historia que contar se convirtieron en su objetivo; ¿no es ese el propósito de cualquier artista?
En la galería Amaranto Joies de Barcelona se hace ahora una retrospectiva de su trabajo bajo el título Uncanny Incarnations, empezando con piezas del año 1999. Una muestra donde se observa su evolución formal y su muy personal visión de la joyería, que como dice su galerista, Grego García Tebar, son de una técnica muy depurada y transmiten una sensibilidad especial.
El tema central de su trabajo siempre ha sido la relación íntima, la interacción, incluso la lucha, entre el cuerpo humano y la tecnología, el cuerpo como instrumento, como máquina, ayudado por los artilugios tecnológicos. Como explica la galerista: “Propone una reflexión sobre la relación de la tecnología aplicada al cuerpo, desde los corpiños ortopédicos a la nanotecnología. De ahí el resultado de piezas (el colgante y el collar Offspring, por ejemplo) que pueden parecer asépticas y casi instrumental quirúrgico, mezcladas con formas que nos sugieren partes del cuerpo o nos recuerdan a un corpiño. También, explora cómo la tecnología transforma todo aquello que tocamos, de ahí esas piezas con un aspecto floral ( Flowerpiece) construidas con formas geométricas y con elementos de plástico gris que a su vez son de maquetas de submarinos, como un reflejo de la desaparición de la naturaleza por la invasión tecnológica del ser humano”.
Katja Prins utiliza en sus creaciones materiales nada convencionales, desde el plástico, al vidrio, la goma de poliuretano o la porcelana. El resultado son piezas de una intrigante y extraña belleza, que producen algo de desconcierto, incluso confusión, que plantean preguntas, que estimulan la mente y nos hacen pensar. El diseño no nos ofrece respuestas, sólo presenta la pieza sin muchas explicaciones, sin hacer juicios de valor preestablecidos, dejando que el usuario las interprete. Del mismo modo que se apela a un tipo de belleza inusual, alejada de los parámetros clásicos, se atrapa a nuestra mente enganchándola con esa inquietud que se provoca en un positivo diálogo con nuestra realidad.