Baleària busca casa propia
La naviera crece un 14% en Barcelona y negocia con el puerto la construcción de una nueva terminal
Baleària ha anunciado un plan de inversiones de 450 millones en los próximos cinco años
La naviera Baleària, propiedad de Adolfo Utor y el Grupo Matutes, busca casa propia en Barcelona después de registrar un crecimiento del 14% tanto en número de pasajeros como en carga en el 2016. Según informó la compañía, que actualmente atraca sus barcos en los muelles de Drassanes y el Port Nord, está negociando con el puerto de Barcelona la construcción de una terminal propia.
Baleària opera tres rutas diarias entre Barcelona y Mallorca, Me- norca y Eivissa, que incrementa con una frecuencia extra durante los meses de verano. Durante el año 2016, la naviera transportó 360.000 pasajeros y 1,8 millones de metros lineales de carga desde Barcelona, lo que supone un incremento del 14% respecto el año anterior, tanto en pasaje como en carga. La naviera empezóaoperar en Barcelona en el 2003.
Baleària anunció esta semana un plan de inversiones de 450 millones de euros en los próximos cinco años, la mayoría en nuevos buques y modernización de su flota, tras obtener un beneficio de 39 millones de euros en el 2016, el 38% más que el ejercicio anterior.
En el ejercicio del 2016 (del 1 de noviembre al 31 de octubre), la compañía facturó 329,5 millones de euros, el 13% más que en el 2015, y el resultado deexplotación subió un 17% hasta 78,8 millones, unos resultados “ligeramente superiores” a los del 2009, los mejores registrados por la naviera.
Según informó el grupo, 320 de los 450 millones del plan de inversiones 2017-2021 se destinarán a renovar la flota. Por un lado, la compañía adquirirá tres nuevos buques inteligentes ( smartships) propulsados por gas natural, actualmente en construcción en el astillero LaNaval y otros dos en el italiano Cantieri Navale Visenti. Por otro lado, el grupo prevé la compra de otros barcos y la modernización de la flota por remotorizaciones –reconversión en motores de gas. El resto de la inversión, después de dedicar 320 millones a barcos, se dirigirá a las nuevas terminales que construirá en Barcelona, donde el proyecto está bastante avanzado, Palma y en València, donde la ubicación de la estación marítima es provisional desde hace diez años.
El año pasado, Baleària transportó un 10% más de pasajeros, de vehículos y de carga rodada, hasta los 3,5 millones de pasajeros, 750.000 vehículos y más de 5 millones de metros lineales de mercancías de las rutas nacionales (Islas Baleares, Ceuta y Melilla), y aumentó el 15% el tráfico internacional (en sus rutas Estados Unidos-Bahamas, a Marruecosya Argelia).
Baleària, que cuenta con 1.500 empleados, prevé que el tráfico internacional pase de representar el 2% de la facturación al 50% en un plazo de 5 a 10 años, con los proyectos en el Caribe y las líneas del norte de África. Los proyectos de operaciones de la empresa en Cuba, según reconoce la firma, están paralizados ante la imprevisibilidad del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.