Más SUV, menos Mini
permiten modificar su inclinación– su capacidad es ahora de 1.390 litros, 220 más que antes.
Como ya sucedió con el nuevo Clubman, también mucho más largo que su antecesor, el aumento de las dimensiones exteriores era imprescindible para poder competir en igualdad de condiciones con los SUV compactos que se disputan el mercado prémium.
Sin embargo, y pese a que desde la compañía insisten en que el Countryman mantiene la tradición y el estilo de conducción típicamente Mini, no son pocos los entusiastas de la marca que consideran “traicionado” el espíritu original del fabricante de Oxford. El encanto y la personalidad de los Minis clásicos –dicen– va perdiéndose con cada evolución a la que se someten sus modelos, cada vez más convencionales y “desnaturalizados”.
Sea como sea, los resultados mandan y visto que la tendencia SUV se impone, Mini ha reaccionado ofreciendo más versatilidad, más comodidad y más contenidos que refuercen el carácter exclusivo y lujoso del nuevo Countryman.
Innovador y tecnológico Entre sus nuevas funcionalidades destacan el accionamiento eléctrico del portón trasero con apertura y cierre sin contacto, la pantalla central táctil –novedad en la marca– y la disponibilidad por vez primera de una versión híbrida enchufable. Denominada Mini Cooper S E Contryman, llegará en junio con un sistema de propulsión combinada de 224 CV y una autonomía eléctrica de 40 km con velocidades de hasta 125 km/h en modo EV. Su tiempo anunciado de recarga será de 2,15 horas en Wallbox o 3,15 h en una toma estándar y los registros energéticos que certificará son de sólo 2,1 litros de media a los 100 km con un valor de emisiones de CO de 49 g/km.
Las motorizaciones disponibles para el lanzamiento, todas con tecnología TwinPower Turbo, son las ya conocidas de otros modelos Mini aunque optimizadas en eficiencia y rendimiento. Se trata de dos motores de gasolina y dos diésel que registran reducciones de consumo de hasta 1,4 l/100 km. El Countryman monta un 3 cilindros de 1,5 litros y 136 CV, mientras que el S lleva un 4 cilindros de 2 litros y 192 CV. Por su parte, el D Countryman equipa un bloque de dos litros con 150 CV, o bien 190 CV en la variante SD.
Como alternativa a la caja manual de 6 marchas de serie se oferta una caja de cambios Steptronic de 6 o 8 velocidades según versión. Por lo que respecta a la evolucionada tracción total ALL4, que no es permanente ni desconectable, está disponible para todas las versiones si se desea, mientras que el tren de rodaje combina la acreditada agilidad y maniobrabilidad de Mini con un elevado confort de marcha. Adicionalmente, se pueden modificar los ajustes de motor, cam- bio, dirección, suspensión y sonoridad a través de los tres modos de conducción: Mid, Sport y Green.
El precio del nuevo Mini Countryman, que ya está a la venta en España, arranca en los 27.800 euros.