Así son los perfiles expertos en e-commerce que las empresas demandan
El comercio online se dispara, pero a las compañías les cuesta encontrar profesionales "competentes"
Durante años tuvo un crecimiento lento en nuestro país, era algo más típico de países como Japón o EE. UU. Pero, poco a poco, las resistencias culturales han ido cayendo y la tecnología ha simplificado el comercio electrónico hasta permitir comprar con un par de golpes de pulgar. Hasta el punto que la facturación del e-commerce en España en 2016 creció un 23,3% respecto a 2015, rozando los 22.000 millones de euros. El 70% de los internautas en España realizan ya compras online, el cuarto país europeo, por detrás del Reino Unido, Alemania y Francia, con un gasto medio anual de 1.400 euros. El comercio electrónico lo está cambiando todo. Cómo consumimos y cómo las empresas se organizan para vender y distribuir sus productos. Y eso implica contratar los perfiles profesionales necesarios. Dehecho, los contratos de trabajo vinculados al sector del e-co mm e ce han aumentado entorno aun 20% a lo largo del pasado 2016. La demanda es tal que, según
un informe de Ad ecco, el sector de la compra-venta online registró el año pasadoun94% deempleabilidad. Tal es el nivel dedemanda, queempieza
a haber escasez de profesionales con
las competencias adecuadas.
Más que perfiles, competencias Pero, ¿cuáles son exactamente los tipos de empleo que se requieren ahora mismo en el sector del comercio electrónico? Pues más diversos de lo quepensamos, porque el e-commerce marca transversalmente los procesos y las necesidades de las empresas, como explica Enrique Benayas, director general del ICEMD, el Instituto de la Economía Digital de Esic: "Los nuevos tipos de profesionales del comercio online abordan toda la cadena de valor de un negocio: fabricación, marketing, ventas, logística, financiero, operaciones, recursos humanos..., por lo que las áreas de e-commerce contienen competencias muy transversales a toda la compañía". La diferencia con el comercio tradicional, sostiene Benayas, es que en el comercio electrónico los procesos están centrados en el cliente y usuario: "La experiencia de cliente es clave, y el análisis del dato es fundamental para tomar decisiones en tiempo real y realizar previsiones. Además, la forma en que evolucionan las plataformas tecnológicas que hacen posible el negocio obliga a la excelencia y la rapidez de la ejecución". Lo importante, explica Benayas, es que no se trata solo de encontrar un perfil profesional concreto, sino que las empresas buscan y exigen profesionales con unas competencias muy determinadas, que se podrían clasificar en tres categorías:
1. Digital marketing. Competencias relacionadas con el marketing digital, tales como el posicionamiento en buscadores, el inbound marketing, el branded content management, el social media management, el display marketing, la publicidad programática, la experiencia del cliente y usuario, el cuidado del cliente y las analíticas.
2. Digital management. Competencias vinculadas con la dirección y gestión de empresas en entornos digitales. Ya sea en la estrategia de negocio, en la gestión del talento digital, en la transformación digital de los procesos comerciales o en la incorporación de procesos y metodologías que permiten integrar la innovación en la compañía.
3. Disrup ti vete ch no logi es. Formación en cómo las tecnología s disruptivas afectan a los modelos de negocio ya la relación con los clientes, como, por ejemplo, el Big Data, la inteligencia artificial y cognitiva, la ciberseguridad, la realidad virtual y aumentada, el hacking ético, el blockchain o el internet de las cosas.
Nuevas profesiones, nueva jerga
Quedan claras las tres grandes áreas de competencias que se piden a los profesionales, pero, ¿cómo se llaman sus puestos de trabajo? ¿Qué estudian, qué pone en sus CV y en sus tarjetas? Son trabajos que no existían hasta hace poco, así que las descripciones de sus funciones suenan a jerga ininteligible para el comúndelos mortales. Enrique Benayas engloba los principales perfiles en cinco grandes funciones dentro de los e-commerce de las empresas.
Dentro del marketing y las ventas digitales, encontramos puestos tales como el e-commerce & multi-
El comercio electrónico afecta a toda la empresa, y por eso se piden competencias transversales Los contratos vinculados al sector del e-commerce aumentaron en España un 20% en 2016 Los puestos que ha creado el comercio electrónico no existían hace poco y sus nombres son una jerga propia
channel manager, el lead generation manager, el performance marketing manager, el social media manager, el branded content manager, el web & mobile project manager, el web conversion specialist, el app developer, el user Xperience developer (omanager), el growthhacker, el analista webyelcustomerservice manager.
En cuanto a la gestión y el conocimiento del cliente, algo básico en el e-commece, las empresas necesitan data scientist managers, data architect managers, data engineer managers, data analyst managers, customer experience y customer relationship managers.
Y, por supuesto, las firmas necesitan expertos en programación: desarrolladores y programadores de lenguajes como Python, Spark, Scala, Hadook, Ruby... Y también expertos certificados enarquitectura de virtualización y cloud computing de los fabricantes referentes del mercado, comoVMware, Microsoft Azure, Amazon AWS, Citrix y la tecnología OpenStack como referencia en arquitecturas cloud.
Y para que todo el proceso funcione, se requieren directores de proyectos digitales, como los CTO (responsables de tecnología), los SCRUM masters, (agilizadores de procesos y cómo se desarrollan), los user Xperience managers, los owner product (parecidos al perfil de un product manager), los QA's: quality assurance (que aseguran la calidad de los productos digitales) y los full-stack developers (programadores informáticos, que conozcan bien y a quienes les sean familiares todas las facetas del front-end y del backend y los diferentes sistemas operativos y componentes que quedan en medio de esas fronteras).
Perfiles y competencias que las empresas necesitan ya y mucho, y que los usuarios no suelen tener en cuenta cuando compran algo con un par de golpes de pulgar. •