Futuro perfecto
Estrella en Frankfurt, el nuevo Audi A8 es en sí toda una exhibición tecnológica sólo al alcance de fabricantes como la firma alemana
Frankfurt es el salón preferido por los fabricantes alemanes. Es lógico, puesto que juegan en casa y suelen exhibir sin limitaciones todo su potencial tecnológico y creativo. Además, Audi, BMW y Mercedes ocupan un lugar de privilegio entre los fabricantes mundiales Premium y su dominio del mercado se traduce en brillantes novedades. Y el imponente Audi A8 es una de las principales, aunque su presentación internacional tuvo lugar a mediados de julio en Barcelona.
Tal vez lo menos sorprendente del flamante A8 sea su diseño, con una línea que puede calificarse de continuista, aunque es cierto que la parrilla, los grupos ópticos y toda la parte trasera anuncian un nuevo lenguaje de diseño. En cualquier caso, el A8 es un auto- móvil que vuelve a adelantarse a su tiempo, un nuevo referente en tecnología, concretamente en conducción autónoma, hibridación y confort de marcha.
Entre las novedades que llegan con el A8 destaca la tecnología mild hybrid. Con el sistema eléctrico principal de 48 voltios se abren nuevas posibilidades de uso. Así, el A8 híbrido podrá rodar en modo de marcha por inercia, en silencio, entre 55 y 160 km/ h. También podrá rodar en modo 0 emisiones, con el motor térmico apagado, durante 40 segundos. Otra novedad relevante es la suspensión completamente activa, basada también en el sistema eléctrico principal de 48 voltios. El sistema de suspensión electromecánico del A8 es completamente activo y controla cada rueda de forma individualizada y se adapta a las condiciones de la carretera. Gracias a la cámara de video frontal, el sistema detecta las irregularidades de la carretera y es capaz de ajustar de forma predictiva el funcionamiento de la suspensión. Incluso antes de pasar por encima de un bache. El complejo sistema actúa 18 veces por segundo, ofreciendo una experiencia de conducción totalmente nueva.
Junto con el sistema de seguridad Audi pre sense 360°, la suspensión activa del nuevo Audi A8 eleva la seguridad pasiva a un nuevo nivel. En caso de un impacto lateral inminente a más de 25 km/h, los actuadores de la suspensión elevan la carrocería hasta un total de 80 mm en apenas medio segundo. Como resultado, la colisión se dirige a las áreas más reforzadas, como los travesaños laterales y la estructura del piso, lo que reduce la carga que sufrirían los ocupantes del vehículo en el impacto en un 50 por ciento comparado con una situación similar en la que la carrocería del vehículo no se elevara.
Asimismo, el flamante A8 es el primer automóvil de producción desarrollado específicamente para una conducción autónoma nivel 3. Es decir, el A8 podrá tomar el control de la conducción en caso de circulación lenta, en un atasco, hasta 60 km/h. El sistema se activa con el botón AI de la consola y, a partir de ahí, el coche arranca, acelera, gira y frena completamente solo. Disponible a partir de 97.500 euros, con dos carrocerías de 5,17 y 5,30 metros de longitud, la marca ofrece de inicio dos motores V6 de 286 (TDI) y 340 CV (TFSI).
Llega en octubre y es un nuevo referente en conducción autónoma, hibridación y confort de marcha