Atractivo y funcional
Kia, la marca coreana, tiene en el Optima a un buen representante entre los familiares del segmento D
La versión Sportswagon del Optima demuestra el interés de Kia por atender las demandas del mercado europeo. Se trata de una berlina capaz de competir sin complejos con los representantes habituales del segmento.
Las principales virtudes de este modelo se enmarcan en apartados como la habitabilidad y la capacidad de su maletero. La anchura interior permite viajar holgadamente a los ocupantes de las plazas delanteras y, sobre todo, ofrece el espacio suficiente para que tres personas puedan ubicarse con holgura en la banqueta posterior, incluyendo al ocupante de la plaza central.
Accesible mediante un gran portón, el maletero ofrece un espacio libre de obstáculos. Su volumen útil alcanza los 552 litros. Este espacio ha sido concebido para facilitar al máximo las operaciones de carga y transporte al cual está destinado.
En el Optima Sportswagon se aprecia la evolución hecha por Kia hasta ofrecer una calidad satisfactoria de sus materiales. Destaca el atractivo de detalles como las costuras presentes en el salpicadero y puertas o los embellecedores metálicos. En el capítulo de equipamiento, esta berlina familiar ofrece el sistema multimedia con pantalla de 8 pulgadas, sistemas operativos necesarios para interaccionar con el smartphone y la carga inalámbrica.
Al margen de sus incuestionables cualidades funcionales, esta versión del Optima destaca por su atractivo estético. Este automóvil ofrece una línea atractiva y estilizada, con una carrocería que desciende suavemente hacia atrás y unas barras de techo discretas que completan el conjunto. La firma coreana logra así un conjunto muy atractivo, potenciado por los detalles específicos derivados de la versión GT Line.
El propulsor es un bloque diésel de 1,7 litros, capaz de desarrollar una potencia de 141 CV. Ofrece una notable respuesta desde bajas revoluciones y sube de régi- men con energía. Ofrece buenas sensaciones al conductor y una notable solvencia para realizar un adelantamiento o incorporarse sin problemas a una vía rápida. La versión automática DCT de siete relaciones supera los 200 km/h, pero la aceleración pura 0-100 km/h arroja un registro discreto, de 11,1 segundos. Los consumos de combustible de este automóvil son otra de sus virtudes, con medias reales que no suelen superar los 6 l/100 km.
Sin ser un automóvil con aspiraciones deportivas, el Optima SW ofrece un interesante dinamismo y mantiene un buen nivel sobre todos los trazados. Su agilidad permite practicar una conducción rápida y divertida, combinada con elevados niveles de confort. Cuenta con altos estándares de seguridad generados por dispositivos como la asistencia de frenada de emergencia, mantenimiento de carril, detección de ángulo muerto, control de crucero adaptativo, reconocimiento de señales de tráfico, etcétera.