La burbuja turística se desinfla
Tras dos años extraordinarios, la recuperación de destinos del Norte de África devuelve a España al crecimiento orgánico
La burbuja empezó a perder aire en el cuarto trimestre del 2017, cuando la inestabilidad política catalana castigó la llegada de turistas internacionales y tumbó las previsiones de superar los 84 millones de visitantes anuales. Aun así, se cerró el año rozando los 82 millones de turistas internacionales, superando el extraordinario récord del 2016 y situando a España como segundo destino turístico mundial, sólo superado por Francia .“El comportamiento normal de un destino maduro como España es un crecimiento anual de entre el 2% yel 4%; crecimientos próximos o superiores al 10% como los de los dos últimos años son casos extraordinarios”, asegura John Kester, director del programa de estadísticas y tendencias de la Organización Mundial del Turismo (OMT), agencia de la ONU.
“Lo que vemos en lo que llevamos de año es una vuelta a ritmos de crecimientos más naturales, que contrastan con la demanda disparada de los dos últimos años, donde en muchos destinos se colgó el cartel de completo”, asegura José Luis Zoreda, vicepresidente ejecutivo de Exceltur. Según el lobby turístico, este año arranca con una previsión del crecimiento del PIB turístico del 3,4%, mientras que en el 2017 este superó el 6%. Según el IN E, los primeros cuatro meses del año acumulan un aumento del 2,3% de las llegadas de turistas extranjeros, que proyectaría un cierre de 83,6 millones de personas.
Los principales indicadores que apuntan a una ralentización del crecimiento del mercado turístico español son las pernoctaciones estancadas y la recuperación demercados competidores que llevan un par de temporadas fuera de juego. “Solamente en el primer cuatrimestre, Egipto, Túnez y, sobretodo, Turquía han ganado tres millones de turistas más que el año pasado ”, asegura Zoreda.
Este trasvase a sus destinos tradicionales de los turistas presta-