Google+ no ha podido hacerse un hueco en la red
El popular buscador renuncia después de siete años a tener presencia en las redes sociales
Google+ ya es historia. Es la crónica de una muerte anunciada. Porque la red social lanzada por el célebre buscador en el 2011 nunca consiguió levantar el vuelo. Nació para competir con la todopoderosa Facebook. Sin embargo nunca logró ser un rival serio.
Esta semana Alphabet, la sociedad matriz, aprovechó el escándalo de un fallo de seguridad que comprometía datos de los usuarios para poner punto final a la aventura. Google+ es uno de los pocos proyectos de la firma californiana quehafracasado (en esta categoría caben Wave, Picasa, iGoogle, Dodgeball, Buzz) perotal vezeste es el más sonado.
Sunúmerodeusuariosnoera desdeñable: unos 400 millones. Sin embargo el tiempo de uso que dedicaban a la cuenta era una minucia: no superaba los cinco segundos por sesión en el 90% de los casos. En el 2016 el tiempo ascendía a doce minutos, con lo que la caída ha sido importante de un año para otro. Además, los números con Facebook no aguantan: la red de Mark Zuckerberg cuenta con 2.167 millones de usuarios activos y al ser Google+ más pequeña no se generaba “el efecto llamada” o “efecto red” para aumentar usuarios.
Durante su primer año de vida, se ligó la plataforma Google+ al portal de vídeo YouTube, pero cuatro años después la empresa dio marcha atrás. De hecho, la empresa californiana reconoció que la idea de vincular la red a otros servicios “era una meta bien intencionada, pero esto daba lugar a algunas experiencias de productos que los usuarios a veces consideraban confusas”.
“De entrada, Google+ llegó tarde, cuando otras redes como Facebook y Twitter ya estaban establecidas. Luego, los usuarios la consideraban como un anexodelcorreodeGmail, yesto representaba un freno, porque las redes sociales genéricas se perciben como un espacio para explorar otras identidades diferentes del estudio o trabajo. En este sentido, el error de base de Google+ fue que no tenía, a diferencia por ejemplo de Instagram, un enfoque específico: para eso ya estaba Facebook”, indica el sociólogo Javier de Rivera (Sociologiayredesociales.com).