Auténtica navaja suiza
El nuevo Citroën Berlingo demuestra que hay vida más allá de los populares SUV. Y tiene que ser así porque de lo contrario el mercado sería muy aburrido. Compañero incansable de viajes, esta nueva edición del Berlingo tiene un estilo fácilmente reconocible a simple vista. Una carrocería muy vertical, generosa superficie acristalada y grandes puertas laterales correderas para ofrecer el mejor acceso al interior del habitáculo.
Entre los cambios, destaca un capó más alto y corto y un estilo muy personalizable, como ocurre ahora con la mayoría de los automóviles destinados al ocio. Este vehículo multiusos mejora notablemente en todos los apartados y comparte plataforma, tecnología y gama mecánica con otros vehículos del grupo PSA. Una vez en su interior queda claro que es un vehículo para usuarios de estilo de vida activo, que deseen un coche para realizar viajes de forma agradable, con comodidad y espacio.
Con la versatilidad como gran argumento al poder quitar o poner asientos y adaptarse a las necesidades de cada momento, de cada salida o de cada aventura. Un aspecto básico en un coche de esta filosofía es el maletero, y en este caso es espectacular. Esta variante de carrocería M, la pequeña, ofrece nada menos que 775 litros. Desde luego, un argumento sumamente seductor a la hora de elegir un modelo. Además, gracias al diseño cuadrado de la carrocería, la boca de carga es enorme, con un umbral bajo que facilita mucho el acceso a todo el espacio interior.
Y la luneta trasera puede abrirse de forma independiente, sin necesidad de abrir todo el portón cuando queremos dejar prendas u objetos pequeños en el interior. Desde el puesto de conducción se disfruta de un equipamiento tecnológico propio de un turismo, con una pantalla táctil de 8 pulgadas con navegador, cámaras de visión periférica y head-up dis-