Hibridación integral
Estrena una nueva plataforma y una gama de motores de hibridación ligera
Lanzado al mercado en el 2014, el Discovery Sport es un elegante y deportivo automóvil destinado al segmento de los SUV premium de tamaño compacto. En su nueva entrega promete mayor eficiencia y deportividad, además de mejorar sus virtudes off-road.
El Discovery Sport adopta una nueva plataforma denominada Arquitectura Transversal Prémium (PTA), diseñada para dar respuesta al proceso de electrificación de la marca. Es un 13% más rígida que la anterior y permite disfrutar de un espacio interior superior. De esta forma, es posible ofrecer en opción versiones de siete plazas, con una tercera fila formada por dos asientos, incrementando su versatilidad.
En el apartado mecánico, la gran novedad es la incorporación de la tecnología Mild Hybrid (MHEV) en todos sus motores. Esta tecnología se basa en un sistema eléctrico de 48 voltios, encargado de ayudar al motor de combustión en fases de aceleración y de apoyarlo a la hora de iniciar la marcha. El resultado es una reducción de consumos de combustible y de emisiones contaminantes.
La oferta de propulsores está compuesta por dos gasolina, con potencias de 200 y 250 CV. En diésel, tres son las alternativas, de 150, 180 y 240 CV. Todos se benefician del distintivo Eco de la DGT, exceptuando una versión básica de acceso con cambio manual de 150 CV (D150), que cuenta con la etiqueta C. Exceptuando esta última, el resto incorporan tracción integral y cambio automático de nueve relaciones.
En breve, antes de final de año, la gama crecerá con una versión híbrida enchufable (PHEV), baLR Discovery Sport P250 MHEV Landrover.es sada en un motor de tres cilindros capaz de recorrer hasta 40 km en autonomía 100% eléctrica.
Disponible desde 39.400 euros, la seguridad es uno de los puntos fuertes del Discovery Sport. Incorpora de serie cámara de visión trasera y control de crucero adaptativo. También es posible contar con frenado de emergencia autónomo, monitor del estado del conductor o asistente de cambio de carril.
El Discovery Sport marca nuevas referencias de comportamiento lejos del asfalto. Es un extraordinario todoterreno gracias al sistema Active Driveline de segunda generación. Esta tecnología optimiza la tracción y el rendimiento del Terrain Response 2, que se encarga de detectar de forma automática las características de la superficie y ajusta el par motor. Dispone además de controles de descenso, de ascenso y tecnología ClerSidht Ground View, que permite ver el suelo que pisa el vehículo.
La tecnología Terrain Response 2 proporciona unas excelentes capacidades off-road